Partido grande, pronóstico incierto (sábado, 22.00 horas, Anoeta, La Sexta y autonómicas). Por supuesto, en el resultado, porque no hay rival ante en el que la Real tenga que sentirse derrotada de antemano, no a un solo partido y menos si es en Donostia. Pero sobre todo en la imagen que ofrecerá el equipo txuri urdin. Se ha visto más de lo peor que de lo mejor que tiene que ofrecer y va siendo hora de que cambien las tornas. Es la hora de que la Real demuestre que tiene mucho más fútbol de lo que muchos, incluso nosotros mismos, estamos empezando a creer. Y es la hora de que lo haga en un partido grande, contra un rival como el Real Madrid. Philippe Montanier tiene la importante baja de Illarramendi, pero aún así tendrá que sacar lo mejor de su plantilla para acabar con la mala racha que llega ya a los cinco partidos sin conocer la victoria. Anoeta estará prácticamente lleno, como en las grandes noches. Y es que es grande, porque si no se consigue creer que lo es, la Real volverá a tener los apuros del pequeño en menos tiempo del que pueda imaginar. ¿Qué Real veremos? Esa es la duda.
Montanier, fiel a su filosofía de sorprender, vuelvo a hacerlo en la convocatoria contra el Madrid. Por quien introduce en la lista y por quien deja fuera. Rubén Pardo recupera su lugar entre los mayores, esperando por fin sus primeros minutos con el primer equipo. Su debut es una de las noticias que lleva esperando la afición con mucho interés. Lo sorprendente es que quien se queda fuera es nada menos que David Zurutuza, que hasta ahora ha sido titular tanto en un centro del campo de tres jugadores como en uno de dos (el que jugó contra el Getafe en Anoeta). El resto de la lista es la misma que se desplazó a Valencia para jugar contra el Levante. Demidov, sustituido en el último encuentro, era duda, pero finalmente está entre los convocados. Repetir la lista quiere decir que Ifrán tampoco tiene un hueco entre los elegidos para este partido, lo que le coloca ya oficialmente como cuarto delantero del equipo, sobrepasado por Llorente. Fuera se siguen quedando Elustondo y Ansotegi, además del todavía lesionado Illarramendi, que tendrá que esperar para recuperar su puesto como titular.
Como ya empieza a ser habitual, adivinar el once que presentará Montanier es algo muy arriesgado. Bravo, evidentemente, será titular. Por delante, sería muy extraño que no estuvieran Iñigo Martínez, Carlos Martínez y De la Bella. Las molestias de Demidov, y también su estado de forman, dejan en el aire el puesto del otro central, que podría ser Mikel González. Parece seguro que Montanier mantendrá el 4-3-3. No parece probable que Pardo sea titular ante un rival como el Madrid (aunque sería una de las sorpresas más agradables de la temporada, para qué negarlo), con lo que la titularidad parece clara para Mariga, Aranburu y Markel, probablemente éste como 4. Por delante, Xabi Prieto recuperará indudablemente la titularidad de la que no disfrutó en Valencia. Los otros dos puestos son también una incógnita, aunque Griezmann y Vela, sobre todo el segundo, tienen más papeletas que Llorente y Agirretxe, aunque el primero está disfrutando cada vez de más minutos y su titularidad no parece lejana, y el segundo sigue siendo el máximo goleador del equipo. Zubikarai como portero suplente y Cadamuro completan la lista y estarán en el banquillo.
Cinco jornadas sin ganar lleva la Real, incluyendo cuatro derrotas. Hubo mejoría ante el Levante (líder de Primera, no lo olvidemos) pero los ocho puntos que tiene el equipo txuri urdin en su casillero no se movieron. Los de Montanier ocupan la decimoquinta plaza, sólo un punto por encima de los puestos de descenso y tres por delante del colista. El Real Madrid tiene una ventaja con respecto a la Real de nada menos que catorce puntos y marcha en la segunda posición. En cualquier caso, los duelos entre Real Sociedad y Real Madrid siempre han sido especiales y la clasificación no siempre ha dictado el resultado. Anoeta vivirá el ambiente de las grandes noches recuperando, precisamente, un horario nocturno que hacía tiempo que no disfrutaba en fin de semana (el equipo viene de disputar, antes de la visita al Levante, dos partidos seguidos a las 16.00 horas y otros tantos a las 12.00). En casa, la Real ya ha hecho de todo, ganar y perder un partido y empatar dos. El Real Madrid, que suma cinco victorias consecutivas en Liga, ha ganado tres de sus cinco partidos como visitante. La visita de Xabi Alonso siempre es un motivo para la alegría, y más después de la inolvidable ovación del Bernabéu el pasado miércoles.
La historia habla de un duelo muy igualado, aunque con ligera ventaja para el Real Madrid. Han sido 65 los partidos entre ambos equipos, siempre en Primera División, con 21 victorias para la Real, otros tantos empates y 23 triunfos madridistas. Igualdad absoluta sí hay en los goles anotados: 107 para cada equipo. El 6-2 de la temporada 50-51 (con tres goles de Igoa y uno de Caeiro, Epi y Basabe) es el triunfo más abultado conseguido por el equipo txuri urdin. El Madrid logró la mayor diferencia de goles con el 1-5 de la campaña 92-93, aunque marcó un gol más en el 3-6 de la 53-54 (que comparte el honor de ser el partido con más goles junto con el 5-4 de la 28-29, en el que marcaron para la Real Marculeta en dos ocasiones, Kiriki, Bienzobas de penalti y Mariscal). En Atotxa, el Madrid estuvo 22 años y 17 partidos sin perder entre las temporadas 57-58 y 78-79. En Anoeta se han disputado quince encuentros entre Real Sociedad y Real Madrid, aquí con ligera ventaja para los locales, con seis victorias, cuatro empates y cinco derrotas. Eso sí, los blancos han ganado en tres de sus últimas cuatro visitas y no pierden desde el 1-0 de la temporada 03-04, con gol de Karpin.
El partido de la temporada pasada, la 2010-2011, fue la demostración de que la Real podía competir contra los mejores en Primera División. Ganó el Real Madrid, pero no lo mereció, después de los primeros 90 minutos de la temporada en los que Mourinho y su equipo sufrieron de lo lindo. El equipo txuri urdin hizo un partido espléndido, intenso, inteligente. Supo contener los ataques del Real Madrid y generó algunas ocasiones de gol, la más clara en los pies de Griezmann. El Madrid se adelantó con una genialidad que, para colmo, estaba bastante bien defendida. Pero si Di María se saca un derechazo como el que se sacó y el balón se cuela por la escuadra, queda poco más que aplaudir. Era ya la segunda parte. Pero la Real no se hundió, y Tamudo empató al rematar una falta botada por Griezmann. El partido mantuvo su intensidad y estaba para que la victoria se queda en San Sebastián, pero al Madrid le sonrió la fortuna del grande. Una falta lanzada por Cristiano Ronaldo rebotó en la espalda de Pepe y la parábola que adquirió el balón fue imposible para Bravo. La Real pudo empatar con otro rebote, pero Casillas hizo el paradón del partido. La Real perdió, pero tuvo al Madrid contra las cuerdas. Veremos mañana.
2 comentarios:
Pues yo tengo bastante más claro que tú el devenir del partido. Igual no tanto por la Real, que en casa sólo ha perdido de forma inmerecida contra el Athlétic e incluso sacó un empate ante el Barcelona, pero el Madrid está en muy buen momento y si tuviera que apostar todo mi dinero lo haría por una goleada blanca :(
Doctora, entregando el partido desde el inicio como lo hicimos, desde luego que es imposible.. Te imaginarás el cabreo que tengo, porque al Madrid que jugó ayer en Anoeta, sin ir más lejos la Real del año pasado le habría ganado con cierta facilidad. Pero hay que jugar. Sin hacerlo, no se puede ganar.
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