viernes, diciembre 29, 2006

Las cuentas de la salvación

La Real encara la segunda parte del campeonato con el único objetivo de permanecer en Primera División, algo que todavía es posible a pesar del nefasto inicio de temporada. El entrenador del equipo, Miguel Ángel Lotina, ha confesado que, a pesar de que no es muy amigo de las cuentas, alguna ya ha hecho para ver las opciones que tiene de que se cumplan. Lo único que ha dicho es que espera terminar la primera vuelta con 15 puntos, lo que permitiría alcanzar la salvación sin necesidad de hacer una segunda vuelta heroica (que el equipo realista ya ha demostrado en circunstancias parecidas que podría hacerla; en la temporada 2000-2001, en la segunda vuelta se sumaron 29 puntos y en la 2001-2002 nada menos que 31).
La Real tiene ahora mismo diez puntos y le quedan tres partidos: en casa ante Osasuna y Valencia y fuera ante el Racing de Santander. Para que las cuentas de Lotina se cumplan, se antoja imprescindible ganar a Osasuna, algo que no se ha hecho en los últimos años. Dos empates más completarían los cinco puntos que pide Lotina, pero que a nadie se le olvide que una victoria en Santander podría meter al Racing en los puestos de abajo y ampliar la nómina de rivales.
Los datos de los tres últimos años, después del subcampeonato, eran, eso sí, mucho mejores que los del actual. El año pasado, con 16 partidos jugados, la Real tenía 18 puntos y 21 al finalizar la primera vuelta. En la temporada 2004-2005, eran 19 y 22. Y en la campaña 2003-2004, la que más se acerca a los pobres registros de la presente, 13 y 19. En la temporada 2000-2001, la Real llegó a estas alturas de campeonato con 12 puntos y se salvó. El peor registro que se recuerda que pueda servir de aliento a la Real es el del Espanyol en la temporada 2003-2004, cuando apenas sumaba 8 puntos con 16 partidos jugados y acabó salvándose con 43 puntos.
La barrera para la salvación parece estar en torno a los 40 puntos. En los últimos años, los equipos que se han salvado han sido el Racing y la Real (40 puntos en la 2005-2006), el Mallorca (39 puntos en la 2004-2005) y el Racing de nuevo (42 puntos en la 2003-2004).
La Real tiene ahora mismo 10 puntos y 22 partidos por jugar. Para alcanzar los cuarenta, le bastraría con ganar nueve partidos y empatar tres más. Eso permitiría un margen de incluso diez derrotas más. No son todavía cifras imposibles.
El grueso de las victorias debería alcanzarse en Anoeta, aunque bien es verdad que quedan rivales complejos. Los equipos que tienen que visitar San Sebastián hasta final de temporada, por orden de calendario, son Osasuna, Valencia, Athletic, Real Madrid, Deportivo, Mallorca, Levante, Atlético de Madrid, Barcelona, Celta y Racing. Al menos cinco de esos equipos están llamados a formar parte de la Liga de la Real, es decir, de los que lucharán por el descenso.
Fuera de casa, y en ese orden, el equipo txuri urdin tendrá que jugar contra Racing, Sevilla, Recreativo, Zaragoza, Villarreal, Espanyol, Betis, Getafe, Nastic, Osasuna y Valencia. La ventaja de la Real en su calendario como visitante es que ya ha pasado por algunos de los campos más complicados, como el Bernabéu, el Camp Nou o el Calderón, aunque tendrá duras pruebras en el Sánchez Pizjuán o en Mestalla. Este último será el encuentro que cierre la Liga. Esperemos que no sea un partido a vida o muerte y que la salvación se consiga, como siempre, en la penúltima jornada, en casa ante el Racing.

lunes, diciembre 25, 2006

2006, un año para olvidar

Que 2006 ha sido un año para olvidar, en Anoeta y fuera, la pasada temporada y la presente, lo sabemos todos los seguidores de la Real Sociedad. Ahí van algunos apuntes estadísticos y anecdóticos que corroboran que estos últimos doce meses han sido un sufrimiento con el que hay que acabar cuanto antes.

· La Real ha disputado 37 partidos de Liga, casi una temporada completa entre los partidos de la 2005-2006 y la 2006-2007, y sólo ha sacado 29 puntos, un cifra que condena al descenso en cualquier temporada.

· En doce meses, los aficionados realistas sólo han podido celebrar seis victorias. Los rivales fueron Mallorca, Deportivo, Málaga, Racing, Villarreal y Nastic. Cuatro se produjeron en casa y dos como visitantes. Se han perdido nada menos que 20 partidos (nueve de ellos en Anoeta) y se han empatado los once restantes.

· Los tres porteros que han defendido la portería de la Real (Riesgo, Bravo, Alberto, por orden de partidos jugados) han encajado 53 goles, una media de 1,4 por partido. Sólo en siete de los 37 partidos disputados la portería realista no fue perforada por las delanteras rivales.

· El marcador de la Real se movió con los 32 goles que anotó, sólo 0,8 por encuentro. Los realistas no marcaron ni un solo tanto en 16 de los partidos dispuestados.

· Los máximos goleadores en este año han sido Mark González, Skoubo y Xabi Prieto, con cinco goles cada uno. Esos quince goles se anotaron en la temporada 2005-2006.

· Trece jugadores realistas han marcado goles en los últimos doce meses. Además de los mencionados, Nihat (tres), Garitano, Díaz de Cerio y Gari Uranga (dos), y Ansotegi, Aranburu, Diego Rivas, Juanito, Mikel Alonso y Stevanovic (uno).

· Sevilla y Nastic se marcaron sendos goles en propia puerta ante la Real. Los dos se vieron en Anoeta.

· Hasta 37 jugadores han disputado algún partido con la camiseta de la Real. Diez de los que jugaron en la segunda mitad de la temporada 2005-2006 ya no están en la plantilla realista (Nihat, Mark González, Barkero, Gabilondo, Viáfara, Brechet, Alberto, Boris, De Paula y Larrea, aunque éste último está cedido y podría regresar en el futuro). En la presente temporada ya son 26 los utilizados. La Real es el equipo que más jugadores ha empleado.

· Cuatro entrenadores han desfilado por el banquillo realista. Amorrortu empató un partido y perdió tres. Arconada ganó dos y perdió seis. Bakero ganó tres, empató cinco y perdió ocho. Lotina ganó uno, perdió tres y empató cinco.

· El Zaragoza es el equipo que mejores números presenta ante la Real. Dos partidos, los dos en Anoeta, y dos victorias por el mismo resultado, 1-3. Sevilla y Barcelona también han ganado dos veces a los txuri urdin en 2006.

· Ninguno de los derbis jugados acabó con victoria realista. Dos empates ante el Athletic, uno en Anoeta y otro en San Mamés, y sendas derrotas ante Alavés y Osasuna.

· La Copa sigue siendo un calvario. Eliminación en la primera ronda un año más. 4-1 se perdió en Málaga y sólo 2-1 se ganó en Anoeta. Los arbitrajes tuvieron mucho que ver en esa eliminación. Díaz de Cerio anotó los tres goles realistas en esta edición del torneo del KO.

· Mala suerte con las lesiones. Jugadores importantes como Kovacevic, Aranburu o Díaz de Cerio han tenido lesiones largas, sobre todo los dos primeros, que no jugaron con la Real hasta la primera jornada de la temporada 2006-2007.

· El año comenzó y terminó con el mismo partido, Celta - Real Sociedad. Pero el año comenzó con derrota (1-0) y acabó con empate (0-0). ¿Un signo de que el sufrimiento, poco a poco, se va superando?

viernes, diciembre 22, 2006

Los fichajes de invierno de la Real

La Real ha recurrido al mercado de invierno en numerosas ocasiones. Salvo uno de ellos, los fichajes han tenido siempre el objetivo de lograr la permanencia, tal y como sucede en la presente temporada. Aunque se han cometido algunos errores, lo cierto es que esta segunda oportunidad para reforzar la plantilla le ha venido casi siempre de maravilla a la Real. A la espera de conocer los fichajes que se puedan poner a las órdenes de Lotina para el año nuevo, es hora de hacer un repaso a los jugadores que han llegado a San Sebastián en Invierno en temporadas precedentes.

·1997-1998
Cvitanovic. El primer refuerzo invernal llegó con la Real luchando por los puestos altos de la clasificación, en una temporada en la que se alcanzó el tercer puesto. Krauss quiso a Cvitanovic para sustituir a Gica Craioveanu. Sin embargo, el rumano jugó más que el croata, que tardó en coger la forma pero acabó bien la temporada, con tres goles en 17 partidos. No llegó a cuajar en la Real.

· 1999-2000
Jankauskas. El lituano llegó para compensar el fiasco de Bonilla. Empezó muy bien, marcando desde el día de su debut en el Calderón, pero fue perdiendo poder goleador. Pese a todo, colaboró en la salvación con cinco goles. No acabó de gozar del beneplácito de la afición. Salió de la Real con el regreso de Kovacevic.
Khokhlov. La indiscutible calidad del ruso, que maravilló a Anoeta en su primer partido, frente al Oviedo, tuvo siempre como enemigo la frialdad de este jugador. Khokhlov marcó tres goles vitales para dejar a la Real en primera, uno en el decisivo encuentro de San Mamés que certificó la salvación matemática.

· 2000-2001
Demetradze. El primer gran fiasco. El georgiano llegó con la vitola de estrella, fue un jugador caro, pero apenas jugó en la Real. Vino a San Sebastián pasado de peso y nunca demostró ser un jugador profesional.
Julio César. La defensa fue la prioridad de los fichajes de invierno de esta temporada. Este brasileño, al que ya se había visto en Valladolid y Real Madrid, llegó cedido desde el Milán. Jugó 16 partidos de categoría y fue fundamental en la salvación.
Llorente. Dos goles en nueve partidos anotó este joven delantero salido de Zubieta, pero que estaba cedido en el Eibar. A pesar de que prometía tardes de gloria, nunca llegó a triunfar en la Real.
Luiz Alberto. Formó junto a Julio César la nueva pareja de centrales del equipo, y respondió con nivel, aunque menos que su compañero. Tampoco llegó a cuajar del todo en la Real aunque permaneció varias temporadas en el equipo.
Xabi Alonso. Clemente le había cedido al Eibar. A Toshack le pareció una barbaridad. El galés le dio el mando del equipo a la mayor perla que ha salido de Zubieta en los últimos años y no defraudó. Permanece en el recuerdo su partido en Villarreal, donde prácticamente se consiguió la salvación y donde dio una asistencia de antología a Tayfun.

· 2001-2002
Jauregi. Estaba cedido por la Real en el Eibar y Toshack le repescó, pero fue Olabe quien le dio los galones del centro de la defensa, donde jugó junto a Kvarme. Ya nadie volvió a colocarle como mediocentro, puesto para el que en principio llegó a la Real.
Kovacevic. Darko regresó a la Real previo pago de una auténtica millonada al Lazio, pero el serbio no sólo lo vale sino que lo compensó con creces. En esta temporada anotó un gol cada dos partidos, un total de ocho, vitales para lograr la permanencia. Que Darko es el jugador más importante de la Real en los últimos tiempos es algo que pocos pueden discutir.
Nihat. Llegó a San Sebastián como capricho de Toshack, y lo hizo más tarde de lo que hubiera sido deseo del galés por culpa de una lesión en la rodilla. En la fase final de esta temporada jugó de extremo derecha, algo alejado del área, y anotó sólo un gol. Su explosión llegaría en la temporada siguiente, ya de delantero.
Westerveld. Llegó anunciando que era un portero “bueno en todo” y no lo demostró en esta campaña, aunque sí en las siguientes que permaneció en San Sebastián. En todo caso, Toshack le colocó en la portería en lugar de Alberto y Olabe le mantuvo.

· 2005-2006
Mark González. El salvador de la Real en esta temporada. Llegó desde Liverpool, donde no podía jugar por problemas con su permiso de trabajo y demostró lo que es el compromiso en el fútbol, aunque él no iba a jugar en ningún caso en Segunda con la Real. Cinco decisivos goles en 16 partidos ayudaron, y mucho, a conseguir la permanencia.
Skoubo. Deslumbró ante el Athletic, en su segundo partido con la Real, primero como titular, con un golazo y dos asistencias. Después fue bajando el nivel, aunque acabó marcando cinco goles que también sirvieron para lograr la permanencia. Suyo fue el último gol de la temporada, ante el Celta, el día que se logró la salvación matemática.
Stevanovic. Aunque jugó 15 partidos, no dejó ningún detalle, ninguna huella que haga presumir que es un jugador válido para la Real. Marcó un gol que no sirvió para evitar la derrota ante el Alavés y el cese de Amorrortu.
Viáfara. El colombiano, mediocentro, no demostró nada en la Real, a la que llegó como cedido. La Real no ejerció la opción de compra. Sufrió dos expulsiones en once partidos que jugó.

miércoles, diciembre 20, 2006

CELTA 0 - REAL SOCIEDAD 0 Buen punto para acabar el año

La Real despide el año con un punto en Balaidos. Tan bueno y tan malo como se quiera ver, pero el optimismo obliga a pensar que es bueno. Bueno porque el Celta tuvo dos balones en los palos de Bravo que pudieron darle la victoria. Bueno porque la portería se ha vuelto a quedar a cero. Bueno porque la Real sí hizo esta vez un final de partido con opciones de ganarlo. Bueno porque supone sumar cuatro de los últimos seis puntos en juego. Bueno porque, pese a las objeciones que se puedan poner a la Real, el equipo sigue mejorando. Y bueno porque la salvación se mantiene a cinco puntos después de haber jugado fuera de casa. Para hacer el punto bueno de verdad, habrá que empezar el año ganando al Osasuna.
El partido empezó con la buena noticia que todos estábamos deseando, el debut de Elustondo con el primer equipo, y encima como titular. No estuvo mal el chaval en los 45 minutos que disputó (cambio táctico para recuperar el esquema de partidos anteriores, con Garitano junto a Rivas), aunque se le vio algo perdido en ocasiones en el seno de ese trivote que diseñó Lotina para la ocasión, completado con Aranburu y un Diego Rivas al que se vio perdido durante todo el encuentro. Pero la entrada de Elustondo trajo una mala noticia: la suplencia de Kovacevic. Que Darko es imprescindible para este equipo es algo que más o menos todos tenemos claro. La última media hora del partido debería bastar para convencer a los incrédulos. Tuvo dos ocasiones de gol, una falta a la que no llegó por centímetros y un cabezazo forzado que se fue por encima del larguero. Pero el juego que generó, las salidas que dio el equipo y la cesión que Xabi Prieto (que se creció durante todo el partido, incorporándose al centro y convirtiéndose en muchas ocasiones en el cerebro del juego realista; sobresaliente por primera vez en la temporada) debió convertir en el 0-1 son motivos más que suficientes para no sacarle del once inicial. La Real nunca ha ganado un partido si Darko estaba disponible para jugar y se ha quedado en el banquillo.
La sensación que deja el partido, en todo caso, es la de sí pero no. Sí juega mejor la Real, pero no basta para ganar partidos. Sí parece que tiene más presencia en ataque, pero no se traduce en demasiadas ocasiones de gol. Sí defiende mejor (gran partido de Mikel González que sigue progresando), pero pequeños y tontos errores devienen en ocasiones del rival. Sí opta la Real a ganar los partidos, pero se resisten los tres puntos. Sí parece que la Real no es un equipo tan malo como indica la clasificación, pero no termina de salir de la zona de descenso. Lotina sí acertó esta vez con los cambios, que dieron más opciones ofensivas en el tramo final del partido. Queda alguna que otra incógnita del arbitraje, sobre todo una jugada casi al final con Xabi Prieto que bien pudo ser penalti a favor de la Real.
Hoy se pudo ganar y se pudo perder. Y por eso el punto es positivo. A pesar de que el Celta es un equipo batible, que tampoco demostró gran cosa y que en casa tiene severos problemas. A pesar de que algunos veíamos la posibilidad de dos victorias seguidas (que podrían ser tres si Anoeta vuelve a ser un fortín) que habrían sido un bálsamo incomparable para cerrar un año que todos esperamos olvidar cuanto antes.

martes, diciembre 19, 2006

PREVIA Celta - Real Sociedad. En busca del salto hacia la salvación


La Real llega a Vigo (miércoles, 20.00 horas, Balaidos, PPV) con la posibilidad, como dice Lotina, de "crear el rumor" de que va a salir de los puestos de descenso. Después de catorce jornadas de sufrimiento, ha llegado la primera victoria, y llegó en Anoeta, ante un rival directo para eludir la categoría. Aunque el Celta no anda fino en Balaidos esta temporada, ganar allí sería un salto importante. Primero, porque serviría seguro, para meter puntos a algunos de los rivales de la zona baja (Betis y Nastic juegan entre ellos). Segundo, porque daría moral. Y tercero porque permitiría hacer unas cuentas más realistas y factibles pensando en la salvación a final de temporada.
El entrenador vizcaíno sólo ha introducido una novedad en la convocatoria, y es la más ilusionante en mucho tiempo. Elustondo viaja por primera vez con el equipo, ocupando el lugar de Novo. Si de verdad la Real aspira a ser un equipo de cantera, la mala situación en la tabla no puede ser excusa para no alinear jugadores del Sanse, siempre que éstos estén preparados para formar parte del primer equipo. Ansotegi, por tanto, sigue fuera de la convocatoria y Labaka será el único central que se siente en el banquillo. En cuanto al equipo titular, después de la buena imagen del Camp Nou y del triunfo ante el Nastic, Lotina no quiere hacer muchos cambios y será muy similar al de las dos últimas jornadas. El responsable de la Real confirmó que estarán sobre el campo diez de aquellos once titulares. Aranburu tiene un fuerte golpe, pero no parece que vaya a ser él el sacrificado.
En la temporada 2005-2006, la Real perdió por 1-0 en Vigo, en uno de los partidos más horribles de los últimos tiempos. Apenas disparó una vez el equipo txuri urdin entre los tres palos y no generó ni una sola ocasión de peligro. Y eso que la Real tuvo más de una hora de juego después de que Canobbio anotara el solitario gol que dio la victoria al Celta. Aquel encuentro fue el debut en la Real de Stevanovic, que apenas entró en juego. Amorrortu, que había salvado el puesto con la victoria ante el Cádiz una semana antes, estaba cada vez más cuestionado. Tres partidos después dejó de ser el entrenador de la Real. Tras la derrota en Vigo, los realistas no volvieron a conocer la victoria hasta que se produjo el relevo en el banquillo y llegó Gonzalo Arconada.

domingo, diciembre 17, 2006

REAL SOCIEDAD 3 - NASTIC 2 Sufrir sí valió la pena por primera vez

Victoria por fin. Ni fácil, ni holgada, ni tranquila. Pero victoria, al fin y al cabo. Hace apenas un par de semanas, cuando se empató en Anoeta frente al Getafe, escribí que quince minutos no fueron suficientes, quince minutos de fútbol, quince minutos de valentía. Hoy ha habido quince minutos de fútbol. Y han bastado. Ya lo creo que han bastado. Un equipo que en catorce partidos completos había metido siete goles, ha hecho casi la mitad, tres, en esos quince minutos, los primeros de la segunda parte. Y, por paradójico que resulte, los autores han sido dos de los jugadores más discutidos y discutibles del equipo, Juanito y Diego Rivas. Ahora la pregunta que hay que hacerse es si era tan difícil crear peligro, tan complejo enviar un par de balones al área, tan irreal forzar un error del contrario que acabase en un gol en propia puerta. Lo ha sido hasta hoy. Pero estos quince minutos son a los que hay que aferrarse como si nos fuera la vida en ello.
Confieso que en el descanso estaba pensando ya en Segunda División. Y no debía ser el único. Una amiga, abonada de la Real, desde su asiento de Anoeta, me ha enviado un mensaje al móvil después de los primeros 45 minutos diciéndome que el año que viene pocos partidos iba a ver en Madrid, donde vivo. Y me imagino que el resto de espectadores de Anoeta debía pensar más o menos lo mismo. Que si no éramos capaces de ganar al Nastic, no había nada que hacer, que estábamos sentenciados, que íbamos a caer al pozo de la Segunda División. Pues no. Hemos cogido vida y aliento. No mucho, porque la salvación está a cinco puntos. Pero respiramos.
No es que el partido de la Real haya sido para tirar cohetes. Más bien al contrario, sobre todo en una primera parte en la que el Nastic ha podido controlar el partido mucho más a su antojo que la Real. Hubo errores de la pareja de centrales (el del segundo gol es de libro, y se repitió en una jugada casi idéntica a pocos minutos del final). Los laterales, ambos, hicieron un mal partido, con nula llegada y con mal trabajo defensivo. Kovacevic, aunque bajó balones en algunos de los muchísimos pelotazos que se lanzaron desde la defensa, y Xabi Prieto, que sí es verdad que forzó el error del primer gol, pasaron casi inadvertidos y siguen siendo los dos jugadores más imprescindibles de este equipo.
Pero también hubo cosas positivas. Sobre todo, que la sensación que muchos teníamos tras el segundo gol del Nastic, esa sensación de derrota que tantas veces hemos sufrido en los últimos años, quedó atrás con una remontada inmediata. Pocas alegrías me he llevado esta temporada como la llegada al área de Rivas para anotar el gol del triunfo. Por fin los mediocentros tienen llegada. Aranburu fue el mejor realista sobre el campo y que termine de coger la forma será decisivo para que la Real salga del abismo en el que se encuentra. Jesuli, aunque tuvo detalles que evidenciaron que todavía no ha asimilado dónde está la Real, demostró más garra que calidad y Gari se fajó con todo el mundo, como siempre. Hubo carácter. Pero que nadie pierda de vista que delante estaba el Nastic, ahora, y gracias a esta victoria, el colista de Primera División. Hay que seguir creciendo y veremos si los fichajes que se anuncian contribuyen a ello tanto como el regreso de jugadores hasta ahora lesionados como Skoubo o Mikel Alonso.
Y capítulo aparte merecen, una vez, los arbitrajes. Me da igual que alguien piense que lo digo por el puesto que ocupa la Real en la tabla, pero hay que decirlo. El arbitraje español es nefasto, lo demuestra jornada tras jornada, y la Real está siendo muy perjudicada. Lo de hoy se olvidará porque la Real ha ganado. Pero el primer gol del Nastic llega en una falta inexistente, a Jesuli le hacen un penalti clarísimo que además le cuesta una tarjeta amarilla por protestar y el tercer gol del equipo catalán lo marca un jugador al que segundos después Pino Zamorano expulsa del campo por llevar un anillo. Y todo eso sin contar la decena de faltas que, respectivamente, sufrieron Xabi Prieto y Gari Uranga. Basta ya.
El miércoles la Real tiene una buena oportunidad, una vez perdida la ansiedad de lograr la primera victoria, de dar un paso de gigante. El enfrentamiento entre Betis y Nastic le puede permitir colocar a ambos ya por detrás si se consiguen los tres puntos en Vigo. Pero llegamos con una sensación diferente. Esta vez, por primera vez, sufrir si mereció la pena y la Real sumó tres puntos de una vez.

martes, diciembre 12, 2006

LEYENDAS Jesús Mari Satrústegui


Ahora que la Real está tan necesitada del gol, ¿qué mejor momento para recordar al jugador que lo ha personificado mejor en la historia del club txuri urdin? Jesús Mari Satrústegui es el jugador que más tantos ha anotado con la elástica realista. Nada menos que 133 goles en los 297 partidos de Liga que disputó. Anotó ocho más en competiciones europeas. Y casi siempre los celebró igual. Con su puño en alto. Una imagen que ningún realista ha olvidado todavía, a pesar de que hace 20 años que colgó las botas. Cuando lo hizo, se marchó convencido de que estaba en condiciones de jugar algún año más, a pesar de la lesión que sufrió en 1982 y que, finalmente, fue la causa principal de su adiós.
Pamplonés de nacimiento, fichó por la Real en edad juvenil casi por casualidad, porque Osasuna, el club que había escogido no cumplió sus promesas. Otros equipos, como el Real Madrid, anduvieron detrás de él cuando todavía no había llegado a la Primera División. Tras dos años en el Sanse, dio el salto a la Real en la temporada 73-74 y estuvo en la primera plantilla hasta el final de la 85-86, con Toshack en el banquillo, que apostó como delanteros por los más jóvenes Bakero y Loren. En sus mejores años, tuvo la oportunidad de marcharse de la Real, pero no lo hizo, a pesar de que tenía importantes ofertas, como las tuvieron otros jugadores como Zamora y Arconada.
El mítico 9 realista vivió los mejores años de la historia del club. Los primeros partidos europeos, aquella noche inolvidable en que le marcó dos goles al Inter en Atotxa, los títulos de Liga, la semifinal de Copa de Europa con el Hamburgo, la Supercopa contra el Madrid... Y fue una pieza fundamental de aquel equipo de Ormaetxea. "Son logros que son difíciles de conseguir. Eso es imborrable, lo recurdan con un cariño y con ilusión, y eso no se paga con dinero. Había una ilusión en la gente, en el club, en la prensa... El que ha vivido lo que estoy diciendo va a corroborarlo. Por muchas palabras que se digan, no se puede relatar exactamente lo que se vivió allí", explicó años más tarde.
Satrus es el segundo jugador realista que más veces ha jugado en la selección española, por detrás del insuperable Arconada. Jugó 38 partidos, y entre ellos los de la Eurocopa de 1980 y el Mundial de 1982. El fracaso en ese Campeonato Mundial fue el que pasó factura a todos los jugadores de aquella Real campeona, salvo a su portero, y les apartó de la selección. Con la camiseta roja marcó ocho goles.
En la clasificación de goleadores de la Real en Liga, le siguen López Ufarte, con 101, y Kovacecvic, con 89. Ojalá que el serbio pueda recortar alguno este domingo y que los celebre con su puño en alto, en homenaje al gran Satrus.

domingo, diciembre 10, 2006

BARCELONA 1 - REAL SOCIEDAD O Por fin apareció la Real, pero no tuvo suerte

Otra derrota más, pero ésta es la primera con un sabor distinto. Esta vez sí vimos a la Real jugar un partido. No es que su fútbol en el Camp Nou fuera brillante, pero fue fútbol por primera vez. Ronaldinho hizo que la Real saliera de vacío de Barcelona, pero, insisto, por primera vez, con una sensación distinta. La Real dejó fútbol en la Ciudad Condal y, ahora sí, ese es el camino a seguir para evitar el descenso.
Habrá quien diga que la igualdad del partido se debió a que el Barça lo jugó como una pachanga y habrá quien afirme que no fueron demasiadas las ocasiones de gol de los realistas. Y quizá tengan razón, pero en una temporada tan descorazonadora como la actual, me agarro a un clavo ardiento con tal de terminar ilusionado un partido. Aunque se pierda. Y no vi sólo un clavo. Vi muchas cosas positivas.
Ya empieza a ser habitual tener que destacar el paradón antológico que Bravo nos deja en cada partido. Esta vez fue a Ronaldinho, que nos dejó a todos helados con una tijera que habría provocado que incluso los realistas aplaudiéramos si llega a entrar. El partidazo de Mikel González fue para enmarcar. La lucha de Kovacevic, los balones que aguanta, las jugadas que propicia compensan con creces que el serbio no tenga la agilidad y velocidad de antaño. Y pocos equipos, por mucho que el Barça esté pensando en otras cosas, va a tener más posesión que los locales. La Real lo hizo, gracias también a un buen partido de Aranburu (¡por fin en el doble pivote!).
¿Y por qué perdió la Real? Lo primero que viene a la mente son las tres clarísimas ocasiones de que dispuso, la de Aranburu en la primera parte que sacó Belletti y las dos en los últimos minutos con las que Valdés se erigió en el héroe del partido, primero a Darko y después a Mikel González. O en los dos rebotes que podrían haber acabado con un gol en propia puerta (a perro flaco todo son pulgas; a la Real eso sólo le pasa en contra...). Pero el análisis de todo lo que sucedió en el campo obliga a tener en cuenta dos factores más. Primero, el claro fuera de juego de Gudjohnsen en el gol barcelonista. El trío arbitral anuló dos goles al Barça en la primera parte por esa infración y por lo visto les debió parecer demasiado repetir la acción una vez más. No está siendo una temporada positiva de los árbitros con la Real y hay que decirlo sin que nadie piense que es una excusa. Y no lo es porque el motivo fundamental de ese gol fue el agujero permanente que tuvo la Real en su banda izquierda y que se vio claramente en la jugada del gol. Rekarte se empeñó durante todo el partido (¿órdenes de Lotina para frenar a los centrocampistas del Barça o error táctico del jugador?) en tirarse al centro y dejar demasiados metros de ventaja a un Giuly que si llega a tener la noche inspirada podría haber metido en el área no menos de una docena de balones de gol. Gari Uranga y Aranburu, de hecho, se tuvieron que multiplicar para intentar cerrar esa banda.
Lotina tampoco acertó con los cambios, porque no supo dar al equipo la profundidad que necesitaba para ir a por el empate. Queda por ver qué pasara si Skoubo se recupera y la Real puede disponer de su 9 doble. Sí acertó en el once inicial, con el que otra vez sorprendió a todo el mundo. Este partido fulmina todas las excusas. Si la Real ha sido capaz de jugar al fútbol en el Camp Nou, ¿qué no habría podido hacer si no se hubieran tirado a la basura tantos minutos de partidos como el del Getafe? A falta de fichajes, Aranburu debe ser uno de los mediocentros. Y la exigencia debe ser mucho mayor tanto para Xabi Prieto, que todavía no ha aparecido esta temporada, como para Jesuli. Los dos pasaron inadvertidos por Barcelona. Lotina tampoco reaccionó a tiempo para paliar la sangría de la banda izquierda. Y cuando lo hizo fue para colocar a Garrido de extremo, precisamente cuando el partido demandaba más atacantes para ir a por un Barcelona con diez jugadores (la primera tarjeta a Sylvinho es tan terrorífica como la que sacó a Bravo, ambas por perder tiempo; la segunda es justa), aunque sólo fuera durante los cinco minutos que faltaban.
Y, pese a todo, el partido a mí me dejó una sensación ilusionante. Hoy no me importa tanto lo que puedan hacer el Nastic, el Athletic o el Betis. Hoy pienso que la Real se va a salvar. Y lo pienso por primera vez en la temporada. Porque he visto jugar a la Real y me gusta. Y porque creo que hay mucho margen de mejora en un equipo que, incluso con este nefasto arranque de temporada, no es tan malo. Estoy convencido de que hay tres peores y de que la Real lo va a demostrar.

viernes, diciembre 08, 2006

PREVIA Barcelona - Real Sociedad. El partido menos propicio, la oportunidad más bonita

Con 13 partidos ya sin conocer la victoria, la visita de la Real a Barcelona (Camp Nou, sábado, 20.00 horas) parece el partido menos propicio para conseguir tres puntos de una sola vez, pero este encuentro es, al mismo tiempo, la oportunidad más bonita para hacerlo. Sería la mejor manera de resarcirse de una semana negra, en la que la noticia ha sido la pelea entre Juanito y Rossato y en la que Lotina se ha encontrado también con la lesión de Díaz de Cerio, que permanecerá cerca de dos meses de baja. Que lo extradeportivo no influya es el principal objetivo del entrenador, que se ha declarado "ilusionado" ante este partido.
La convocatoria es la misma de la semana pasada, con la única variación de Agirretxe por Díaz de Cerio. El once, en todo caso, es una semana más una incógnita. Como siempre, no se esperan variaciones en el sistema defensivo, pero queda por ver qué jugadores ocuparán las demarcaciones defensivas. Si la semana pasada ya avisaba de que eran seis los partidos en los que la Real dejó a Darko en el banquillo y no se había ganado ninguno, el empate ante el Getafe en Anoeta ha elevado esa cifra a siete. ¿Será titular Kovacevic? Esa es la principal incógnita del equipo titular que presente Lotina. El entrenador ha pronosticado que la Real sacará seis puntos antes del parón navideño. Nou Camp y Balaidos son las dos salidas que le quedan a su equipo, que recibirá la semana que viene al Nastic en Anoeta en un partido que, independientemente de lo que suceda en Barcelona, será la final imprescindible para que la Real sume tres puntos. ¿Vivirá el Camp Nou la machada de que el colista gane al líder? Torres más altas han caído, incluso en situaciones tan desesperadas como la que atraviesa la Real.
Lo que sí esta claro es que la empresa es harto complicado y que lo más probable es que la tarde del domingo la pasemos pendiente de la radio para ver los resultados de los demás equipos inmersos en la parte baja de la tabla. Aunque la ilusión es lo último que se pierde y visitar el Camp Nou debe ser ilusionante para cualquier jugador profesional, la historia juega en contra. De las 62 visitas que la Real ha rendido al estadio barcelonista, sólo ha conseguido tres victorias. La última, ya casi ni se recuerda, se produjo hace nada menos que hace más de quince años, en mayo de 1991. Aldridge y Atkinson devoraron a un Barça que se acababa de proclamar campeón de Liga. Para el último empate hay que retroceder hasta abril de 1995. Entonces la Real se llevó un punto gracias a un disparo de Imaz que rebotó en la espalda de Koeman, tras un gran partido de todo el equipo, en especial de Aranzabal.
El año pasado la Real sufrió una dura humillación. 5-0 fue el resultado del encuentro, que el Barcelona encarriló muy pronto y en el que además fue expulsado Gari Uranga casi al final. Marcaron Ronaldinho en dos ocasiones, Larsson, Van Bommel y hasta Puyol. Aquel partido puso fin a una racha de tres victorias consecutivas de la Real y supuso el comienzo del periodo más nefasto que se recordaba hasta el comienzo de la presente temporada. Después de visitar el Camp Nou, la Real estuvo seis partidos más sin conocer la victoria.

Ocho años después, Aitor Zabaleta sigue en la memoria

El 8 de diciembre de 1998 la ilusión por el deporte, por el fútbol, recibió una puñalada mortal. Aitor Zabaleta murió esa noche tras ser atacado ante las puertas del Estadio Vicente Calderón de Madrid. Aquel día la Real jugaba un partido de los llamados a ser históricos, pero a nadie le importó el resultado. Durante el partido, todos pensábamos en Aitor Zabaleta. Y todos recibimos como un mazazo sin precedentes su muerte. Un año más, y ya han pasado ocho, es obligado recordarle. No nos podemos permitir el lujo de olvidar lo que pasó si queremos mantener vivo ese utópico objetivo de desterrar la violencia de los campos de fútbol. Todos debemos trabajar por ello. Para que no haya más muertes como la de Aitor Zabaleta, más vidas destrozadas, más noches de amargura y tristeza en un campo de fútbol. Basta de violencia.

jueves, diciembre 07, 2006

Bochorno en el entrenamiento

Zubieta vivió ayer una escena que no se había visto en el entorno de la Real Sociedad. Una pelea a puñetazo limpio entre dos jugadores realistas. Juanito y Rossato se liaron a golpes y la trifulca dejó como resultado un mes de baja para el portugués, que fue operado tras sufrir el hundimiento del pómulo. El incidente, que se produjo en un día festivo, lo contempló medio centenar de aficionados que se desplazaron a Zubieta, muchos de ellos niños.
Juanito afirmó que estaba arrepentido, que sentía vergüenza de lo que había sucedido, pero el daño ya está hecho. Rekarte, capitán del equipo, aseguró que estas cosas son "normales" y que para comprobarlo no hay más que mirar a otros equipos. Lo malo es que los que llevamos a la Real tan dentro no pensamos que la Real sea como los demás equipos. Eso sí, los últimos tiempos están colocando a la Real como otro equipo más del montón, y eso nos duele a todos los aficionados de la Real. Pedro Soroeta, en El Diario Vasco, define lo sucedido en el entrenamiento como otra derrota más de la temporada, y no le falta razón.
La reacción de Lotina no fue tampoco la deseada. Apartó a Juanito sólo unos minutos del entrenamiento y después le permitió volver. Rossato, obviamente, no volvió. El Consejo de Administración ha anunciado la apertura de un expediente sancionador y ojalá que la sanción sea fuerte y ejemplar. Esto es lo que nos faltaba por ver en la temporada más descorazonadora que se recuerda.

martes, diciembre 05, 2006

PARTIDOS INOLVIDABLES Real Sociedad 5 – Athletic 0 (1976-1977)

Pocas jornadas de las vividas en Atotxa son todavía tan recordadas como la del 5 de diciembre de 1976. Y no sólo fue un día en el que el fútbol deparó una enorme alegría para los seguidores de la Real. Fue, además, una demostración de libertad en una época aún muy complicada. Los capitanes de los dos equipos, José Ángel Iribar e Inaxio Kortabarria, saltaron al cesped del viejo campo donostiarra con una ikurrina en sus manos. Una ikurriña que entonces estaba todavía prohibida. La grada celebró con un júbilo la visión de la bandera vasca y los dos equipos posaron juntos junto a ella. Se cumplen hoy 30 años de aquella imagen.
En lo futbolístico, los realistas salieron felices de Atotxa. Yo no estuve allí. De hecho, no había nacido, pero mi padre me recuerda siempre que pocos días ha disfrutado como en éste, "viendo a Iribar recoger el balón de la portería cinco veces". 5-0 fue el resultado. Nunca hasta entonces la Real le había metido cinco goles a los bilbaínos, al club rico de Euskadi. Gaztelu (que aquel día recibió el homenaje de la Real) y Satrústegui marcaron dos goles y Zamora redondeó la cuenta. Quizá el gol más recordado es el cabezazo que el gran Satrus marcó desde casi la frontal del área, el primero de su cuenta, haciendo inútil la portentosa estirada de Iribar. Cinco goles encajó el Chopo. Cinco. A la media hora de juego ya iban tres nada menos.
Según las crónicas de la época, el partido fue espectacular, con continuas llegadas de los dos equipos a ambas áreas, pero si el Athletic no marcó fue gracias a Arconada, según relató al día siguiente El Diario Vasco "un portero excepcional que además les comió la moral en momentos cruciales", un portero que "ante Iribar quiso demostrarle que no debía preocuparse puesto que el entorchado de la internacionalidad quedaba en manos de un digno heredero".
En el Athletic, por cierto, jugaron Villar (actual presidente de la Federación Española de fútbol), Rojo (entrenador, entre otros equipos, del Celta de Vigo) y un tal Iruretagoyena (que pasó por el banquillo de la Real no hace mucho). En la Real jugó buena parte del equipo que pocos años después haría feliz a toda Guipúzcoa y a los realistas de todo el mundo alcanzando el título de Liga.

Real Sociedad: Arconada, Choperena, Murillo, Kortabarria, Olaizola, Gaztelu, Diego, Zamora, Idígoras, Satrústegui (Muruzábal, 84) y López Ufarte.
Athletic: Iribar, Lasa, Guisasola, Madariaga, Eskalza, Oñaederra, Villar (Iruretagoyena, 45), Churruca, Dani, Carlos y Rojo.

Goles: 1-0, minuto 3, Gaztelu; 2-0, minuto 28, Satrústegui; 3-0, minuto 31, Satrústegui; 4-0, minuto 73, Zamora; 5-0, minuto 88, Gaztelu.

Árbitro: Sánchez Ríos. Amarilla para Lasa.

Atotxa. 30.000 espectadores.

El Diario Vasco: "La Real, con mortal contraataque goleó al Athletic. Atotxa fue una emocionante manifestación y no sólo futbolística".

lunes, diciembre 04, 2006

Cinco puntos menos que el año pasado


Tras la disputa de la 13ª jornada, la Real sigue sin ganar un solo partido y en el puesto 19 de la clasificación, aunque ha recortado un punto al Betis, el equipo que ahora mismo marca la salvación. En el club no se hacen cuentas todavía, pero ya es el momento de comparar los resultados de este año con los del anterior. Y, aunque sea difícil de creer, la situación no es tan negativa en términos relativos. Con los mismos rivales que ya ha jugado la Real esta temporada, en la anterior, la 2005-2006, sólo había sumado cinco puntos más.
En la pasada campaña, al igual que lo ha hecho en la presente, la Real perdió en Anoeta contra Sevilla, Zaragoza y Villarreal, y empató ante el Betis. Se han perdido puntos en el Bernabéu (derrota este año, empate el anterior), en Riazor (victoria hace un año, ningún punto en esta campaña) y en Anoeta ante el Getafe (una victoria por un empate). Por contra, se han ganado en casa ante el Espanyol, en Mallorca, en el Calderón y en Bilbao (cuatro empates frente a las mismas derrotas del año pasado).
Contando a los ascendidos y descendidos en bloque, la Real ha conseguido ya este año tres puntos menos que en la pasada campaña, puesto que en Anoeta se ganó a los tres descendidos y este año ya se ha perdido con el Recreativo. Fuera sólo se empató en Cádiz y en la presente campaña el único partido jugado ha sido la derrota con el Levante, con lo que quedarían dos partidos para sumar más de un punto si se pretenden mejorar los registros del pasado año.
Aunque parezca mentira ante los registros negativos que no deja de batir esta Real Sociedad, la situación es menos dramática de lo que debería, también si comparamos el momento actual de la temporada 2006-2007 con el de la 2005-2006. La salvación está a sólo tres puntos de distancia, es decir, un partido, y cada vez parece más claro que para no bajar a Segunda División van a ser necesarios menos puntos que en temporadas precedentes. El año pasado el Alavés descendió con 39 puntos y a las mismas alturas de campeonato en la que nos encontramos ahora, con 13 partidos jugados, tenía 11 puntos, dos más que el equipo que ahora mismo marca la salvación. Los otros dos descendidos, Málaga y Cádiz, tenían 15 y 13 puntos respectivamente. La Real había llegado hasta los 16.

domingo, diciembre 03, 2006

REAL SOCIEDAD 0 - GETAFE 0 Quince minutos no son suficientes

Quince minutos. Eso es lo que duró el partido que jugaron Real Sociedad y Getafe. Los últimos quince minutos. Lo que se vio antes no fue un partido, fue una broma de dos entrenadores jugando a no se sabe muy bien qué. Más grave es el caso de Lotina, que tenía marcado con rojo en el calendario este partido para que se convirtiera en la primera victoria de la temporada Y quince minutos no suelen ser suficientes para que un equipo, más un equipo que está en la situación de la Real, cambie el rumbo de un partido. No lo fueron tampoco en esta ocasión y el empate sin goles fue inamovible e inevitable.
Ya son 13 jornadas y la Real sigue sin ganar. Habrá quien se agarre a esos quince minutos como signo de esperanza. La verdad es que el equipo txuri urdin mereció ganar a los puntos, aunque también es cierto que los seguidores del Getafe dirán que la única parada de mérito en todo el partido la hizo Bravo, otro antológico paradón de la colección que está acumulando el meta chileno en las últimas jornadas. Pero hay que ser serios. El problema de la Real es gravísimo. El de resultados lo ve todo el mundo, no hay más que mirar a la clasificación, pero el partido ante el Getafe deja muchos aspectos que analizar.
Lo fundamental es la actitud, y esa nace de las decisiones del entrenador a la hora de elegir once jugadores y en sus cambios. Que un equipo como la Real se dé el lujo de dejar a Kovacevic y Xabi Prieto en el banquillo es criminal. Que con una insulsa primera parte y ni una ocasión de gol clara no salgan en el descanso es muy duro para un aficionado que acude a Anoeta o ve cada partido por televisión, ya casi de forma desesperada. La salida de Darko al campo fue el revulsivo que hace pensar qué habría pasado si hubiera jugado todo el encuentro. En sus tres primeros minutos sobre el cesped, la Real creó dos jugadas de peligro. Los cambios tampoco fueron especialmente positivos a pesar de su talante ofensivo. Darko salió por Gari Uranga dos minutos antes de que Schuster sí quitara a un mediocentro, Cotelo, para sacar un delantero, Pachón. Ese cambio lo hizo Lotina diez minutos más tarde. Diez minutos perdidos.
Otro grave problema que hace que la Real no gane es la ineficacia absoluta a balón parado, y eso sólo puede tener solución en el trabajo de la semana en Zubieta. El equipo de Lotina gozó de más de una decena de corners y faltas que permitían una jugada de peligro y no asustó al Getafe en ninguna. Así es difícil crear ocasiones de gol. Y sin ocasiones, lo normal es lo que ha sucedido, 0-0.
La Real busca fichajes y suenan nombres, pero no acaba de perfirlarse el del jugador que más necesita el equipo, un mediocentro que saque el balón jugado, que sepa tocar el balón. Lo más parecido que hay ahora mismo en la plantilla de la Real es Aranburu, y viendo lo que se ve domingo tras domingo es descorazonador verle tan alejado de la zona de influencia del juego. Aranburu es el único jugador capaz de dejar alguna jugada interesante, y su primera combinación con Kovacevic fue un soplo de aire fresco al equipo. La Real acabó sólo con Juanito como organizador, y eso es muy duro de ver.
Decía que ya son 13 jornadas sin ganar, pero vamos a ser realistas porque van a ser 14. Esta Real, tal y como ha jugado en la primera parte, puede salir goleada del Camp Nou tal y como salió hace un año. Sólo que entonces llegamos a Barcelona en el quinto puesto y ahora lo vamos a hacer en el penúltimo. Esto empieza a ser una tragedia que no nos merecemos, un sufrimiento que muchos van a empezar a preguntarse si merece la pena. La ilusión se muere y la Real con ella.

sábado, diciembre 02, 2006

PREVIA Real Sociedad - Getafe. La hora del fútbol y los goles



Jornada 13 y ya estamos ante una auténtica final. La Real sólo puede ganar al Getafe (Anoeta, domingo, 17.00 horas, PPV). Cualquier otro resultado roza la tragedia, y más teniendo en cuenta que el próximo encuentro es en el Camp Nou y allí será difícil puntuar. Es la hora de que la Real demuestre que tiene fútbol para seguir en Primera División y también de adelantar algún puesto más. Si la pasada semana la Real dejó de ser colista, en ésta debe seguir progresando. Y si esa demostración se puede hacer con una victoria cómoda, con goles, mejor que mejor para despejar dudas y fantasmas.

Vuelven a la convocatoria, aunque habrá que ver si al once inicial, los dos jugadores con más talento de la plantilla, Kovacevic y Xabi Prieto. Aviso a navegantes: La Real no ha ganado en ninguna de las seis veces que Darko ha sido suplente estando en condiciones de jugar desde que regresó a San Sebastián. Ninguno de los dos ha demostrado este año todo lo que lleva dentro y es el momento de que exploten. La Real les necesita.

Lotina no ha adelantado el once que se medirá al Getafe, pero todo indica que no habrá cambios en la portería, en la defensa (Mikel González y Ansotegi parece que serán los centrales del técnico en su etapa en la Real, salvo que venga un fichaje que les desbanque) ni en los pivotes defensivos (Rivas, que ha recibido elogios de Schuster durante la semana, no se enfrentará de salida a su ex equipo). En el ataque, la primera novedad es que Agirretxe se cae de la convocatoria y vuelve a jugar con el Sanse. A Jesuli se le considera ya fijo en el once y los demás puestos son los que están en disputa.

El precedente es uno de los mejores partidos que la Real disputó el año pasado. 3-0 derrotó al Getafe, con goles de Aranburu, Nihat y Xabi Prieto, este último de penalti y todos ellos en la primera parte. Esa victoria era la tercera consecutiva que conseguía la Real, después de derrotar fuera al Zaragoza y en casa al Deportivo (con el último gol de Darko hasta el día de hoy, hace ya más de un año). El equipo de José María Amorrortu se colocaba quinto, el mejor puesto de la campaña. Ese fue el último partido feliz de la temporada. A partir de ahí comenzó la debacle, precisamente jugando el siguiente partido en Barcelona, como sucede esta temporada. Contando el del Camp Nou, la Real encadenó siete partidos sin ganar, cinco derrotas y dos empates a dos goles en los que los blanquiazules se dejaron remontar, contra Racing y Real Madrid. Que sólo se repita el resultado del año pasado, y no la marcha que siguió a este partido.