Si esta temporada en Segunda es ya de por sí una enorme dificultad para poder escribir crónicas de la Real, lo del partido de hoy en Las Palmas ha superado todo lo previsible. Casi al final de la primera parte, la emisora de radio que sigo por Internet ha dejado de emitir, desconozco si por fallo general o por fallo de mi ordenador. Así que he retrocedido, no ya a la época de los transistores en la que de crío seguía lo que hacía la Real, sino a la edad de piedra. La información de hoy procede de escuchar una emisora nacional, en la que apenas se cantan los goles de Segunda (con errores, encima) sin narrar una sola jugada ni contar nada del partido y leer algún que otro foro (con el retraso propio de Internet) para tratar de conocer las impresiones de quienes sí han estado oyendo toda la retransmisión. Mil disculpas a todos los que leeis Corazón Txuri Urdin por no poder ofreceros una crónica en condiciones, pero aún así, ahí va lo que puedo decir...
Para analizar un partido de la Real, hay que tener en cuenta dos factores muy diferentes. Por un lado está el resultado. La victoria ha sido importantísima. Demuestra que la Real tiene un serio problema en Anoeta, donde no es capaz de ganar, pero al mismo tiempo mantiene viva y sumando puntos a esta Real que tanto tiempo sigue pidiendo a sus aficionados. Aunque se haya empezado mal, si se mejora estos puntos que logramos ahora pueden acabar siendo vitales. Hay que ganar. Y ganar de cualquiera manera. Porque la manera en que se ha ganado hoy tiene aspectos importantes. Importantísimos. Ha sido una gran remontada, se han encadenado dos victorias fuera de casa consecutivas (lo que la Real no hacía desde la temporada 2004-2005) y se han marcado tres goles como visitante que, además, rompen la enorme sequía que padecía el equipo. Eso es lo esencial hoy. Eso es lo que nos tiene que alegrar.
Pero lo que está claro es que esta Real tiene todavía muchísimo que mejorar, y ese es el segundo prisma desde el que se puede mirar a este equipo, el de su juego y el de lo que hace sobre el campo. Más de uno se habrá asustado al escuchar que Las Palmas jugaba desde el minuto 4 con un jugador menos. Sí, sí, otra tarjeta roja para los canarios nada más empezar, exactamente igual que en la Copa, aunque esta vez el expulsado fue el portero. Otra vez la Real con casi 90 minutos por delante para jugar el balón a su antojo y para tratar de ganar con tranquilidad el partido. ¿Tranquilidad? Ninguna, esto es la Real. A los 23 minutos, más o menos igual que en el encuentro de Copa del Rey, Las Palmas se adelantaba en una rocambolesca jugada defensiva de la Real. Otra más. Seguimos sin encontrar una defensa de auténticas garantías y se echa de menos un central tipo Schurrer, que seguramente era una de las cosas que debía haber buscado la Real en verano. Pero no lo hay, así que hay que apechugar con lo que tenemos.
Hasta donde he podido escuchar, la Real se ha topado con el mismo panorama que en el partido copero. Posesión casi total de balón, pero sin crear juego ni ocasiones verdaderamente claras. Y eso que el comienzo no estaba siendo malo y, sin tirar mucho a puerta, el balón sí estaba rondando el área de Las Palmas. Por mal que se haya jugado en la segunda parte, algo sí ha debido cambiar en el descanso. En apenas 14 minutos, entre el 62 y el 76, la Real ha marcado tres goles. No tenía este equipo costumbre de jugar una segunda parte tan alocada. El primer gol ha llegado de penalti, lo que parecía alargar la sequía anotadora en juego. Como en Ipurua, cometido sobre Vaughan. Como allí, transformado por Gerardo (Xabi Prieto esta vez estaba en el campo; que no lo tire él reabre todas las dudas que quiso zanjar Coleman sobre Prieto en su última rueda de prensa). Y Gerardo (¿os acordáis de que era transferible?) ha dado el pase del segundo gol a Vaughan, según parece el mejor de la Real.
El tercero ha sido obra de De Cerio, y es un gol de gran importancia. Por fin el delantero realista marca un gol que de verdad le es útil a la Real, algo que le fue esquivo la temporada pasada. Hoy un tanto suyo por primera vez ha valido tres puntos para el equipo txuri urdin. Pero es que también hay que decir que por fin un delantero realista marca un gol. Como esto sigue siendo la Real, quien pensara que el 1-3 mataba el partido obviamente se equivocaba. El sufrimiento es una de las condiciones en las que la Real juega los partidos, los gane o los pierda. Y por eso, apenas cuatro minutos después, Gerardo cometió un absurdo penalti por mano que colocó el resultado final, 2-3. Eso también es noticia. Quizá la Real haya aprendido a gestionar un solo gol de ventaja con diez minutos de partido por delante. Porque todos sabemos que en años precedentes el panorama era muy distinto.
Y sigo teniendo una pequeña duda con Coleman. Tarda muchísimo en entender la necesidad de hacer cambios. Hoy el primer cambio de la Real llegó en el minuto 78, ya con el 1-3 en el marcador. Ese cambio, por cierto, supuso el debut del delantero del Sanse Viguera. Los otros dos fueron en el 86 y en el 88. Vamos, que el recurso de los cambios lo dejamos para perder tiempo, no para alterar el devenir de los partidos. En los partidos precedentes, los cambios también llegaron en los minutos finales de los encuentros y es una costumbre que no me acaba de gustar. Lo mejor en este aspecto es que Vaughan, del que se ponía en duda su rendimiento físico tras apenas jugar en los últimos meses, no ha sido sustituido y ha aguantado los 90 minutos. Y siendo, dicen, el mejor. El galés promete ser un jugador válido para la Real.
El equipo txuri urdin duerme en décima posición a tres puntos de la zona de ascenso. Y, desde luego, duerme con una sensación de alivio inmensa, la misma que tenemos todos los aficionados. Es bastante probable que perder otra vez en Las Palmas contra diez jugadores hubiera sido casi un rejón de muerte para este equipo tan frágil mentalmente. Lo deseable es que dé la confianza necesaria como para que la Real busque ya, de una vez por todas, la victoria en Anoeta que tanto ansía la afición realista. Y que permita mirar de verdad a los puestos de ascenso. Ojalá el próximo sábado las caras sean de satisfacción.
1 comentario:
la transmisión de punto radio (Diario vasco) se vino abajo. Deberías probar eitb (radio Euskadi) La calidad de la narración es como la noche y el dia (a favor de Radio Euskadi, claro).
saludos.
Al
Publicar un comentario