No por ser un argumento manido deja de tener su validez. En Getafe (sábado, 18.00 horas, Coliseum Alfonso Pérez, Canal + Liga 2, PPV) la Real afronta la hora de crecer, de saber si puede aspirar a algo más que la permanencia en Primera División, objetivo que parece más que encarrilado con la actual renta de nueve puntos sobre los tres últimos equipos de la clasificación. A pesar de los mensajes que salen del club, especialmente del entrenador, no puede bastarnos con hablar del futuro que nos espera con los jóvenes jugadores del equipo. Con todo lo esperanzador que sea eso, que lo es, se compite aquí y ahora. Y Europa no está tan lejos como para que no podamos soñar con el regreso al viejo continente. Para dar el salto que este equipo tiene capacidad de sobra para dar es necesario volver a puntuar fuera de Anoeta, ya que el equipo txuri urdin no ha sumado como visitante en toda la segunda vuelta. Eso supondría dar un valor añadido a la buena marcha de la que, ahora sí, puede presumir el conjunto como local. Toca dar la cara, una vez más, sobre el césped.
Llevaba tiempo sin sorprender tanto antes de un encuentro, pero ya se conoce sobradamente la capacidad de Montanier de hacer lo imprevisible en sus convocatorias. En la rueda de prensa previa al último entrenamiento ya anunció, para disgusto de muchos, que Rubén Pardo, casi inédito desde su titularidad y su gran partido ante el Sevilla, tendrá que esperar otra jornada más su oportunidad. Este fin de semana jugará con el Sanse ante el filial del Athletic. Su puesto entre los que viajan a Madrid lo ocupará Elustondo, que vuelve a la lista tras su lesión. Pero no es el único cambio en la convocatoria. Mikel González, como ya era sabido, se queda fuera por sanción, al ver ante el Zaragoza su quinta tarjeta amarilla, y Ansotegi será su relevo entre los 18 escogidos. La gran sorpresa, no obstante, está en la ausencia de Llorente. Es difícil separar esta decisión de Montanier de las dos ocasiones que falló hace una semana ante el colista. El que entra en la lista es Cadamuro, con lo que el técnico francés regresa a su discurso de cinco atacantes en la lista y tres sobre el campo.
Bravo, una semana más, será el portero titular. La ausencia de Carlos Martínez, todavía lesionado, hace que Estrada sea el indiscutible titular derecho. Cadamuro y De la Bella, titular en Anoeta hace seis días y autor de una asistencia de gol, se jugarán el izquierdo. Demidov regresará al once en el centro de la zaga junto a Iñigo Martínez. La ausencia de Pardo hace que todos los centrocampistas convocados partan con las mismas opciones de jugar. Jugarán tres del grupo formado por Illarramendi, Elustondo, Markel, Aranburu y Zurutuza. Habrá que ver qué decide Montanier, que pocas veces ha tenido que escoger como hombre más retrasado entre Illarra y Elus. Por delante, lo normal sería que la duda fuera la misma de siempre, cuatro hombres para tres puestos: Xabi Prieto, Vela, Griezmann y Agirretxe. El 9 viene de anotar dos goles, el 10 de salir del campo cuando mejor estaba ante el Zaragoza, el mexicano de marcar otro tanto y confirmar una gran segunda vuelta y el francés de ser suplente hace una semana. Ifrán, salvo sorpresa mayúscula, estará en el banquillo junto a Zubikarai y Ansotegi.
La Real inicia la jornada en la undécima posición, casi el mejor momento de la temporada excepción hecha del arranque, las tres primeras jornadas, en puestos europeos. Sus 33 puntos le sitúan con un comodísimo colchón de nueve con respecto a las posiciones de descenso, frontera que ahora marcan los 24 del Racing, y se encuentra a cinco puntos de la zona europea. El Getafe se encuentra dos posiciones y un punto por debajo del equipo txuri urdin. La buena racha de los realistas como locales (cuatro victorias consecutivas) contrasta con el rendimiento lejos de Anoeta en la segunda vuelta, donde cuenta sus tres salidas por derrotas. Los de Montanier han sumado, por tanto, 12 de los 21 últimos puntos en juego. En toda la Liga ha puntuado en cinco de sus tece salidas, con tres victorias y dos empates. El Getafe ha ganado cuatro de sus doce partidos en su estadio, donde el Rayo, el Real Madrid y el Málaga lograron los tres puntos pero donde cayó el Barcelona. Los madrileños rompieron la pasada semana en Villarreal una racha de cinco jornadas sin conocer la victoria.
Getafe no fue una plaza propicia para la Real hasta la pasada temporada, más bien al contrario durante la breve historia de estos partidos la localidad del sur de Madrid se había ganado la aureola de maldita. Todos los duelos entre estos dos equipos, los cuatro que se han producido hasta la fecha, han tenido lugar en partido de Primera División. Los tres primeros se saldaron con victoria de los locales, y el último con goleada visitante. El primero de los enfrentamientos, el de la temporada 2004-2005 supuso la mayor victoria del Getafe, 2-0. En los dos siguientes, la Real cayó por la mínima. En el 2-1 de la campaña 2005-2006 Mark González anotó el primer gol txuri urdin (aunque con camiseta blanca) en el feudo getafense. Aquel fue el partido en el que Jose Mari Bakero debutó como técnico realista, sustituyendo a Gonzalo Arconada. El 1-0 de la siguiente temporada, la 2006-2007, concluyó con cánticos de "a Segunda, a Segunda" desde la grada, algo que acabó convirtiéndose en una realidad.
En la pasada temporada, la 2010-2011, la Real regresó a Primera y rompió el malefio de Getafe con una contundente goleada, la segunda más abultada como visitante en toda la historia de los realistas. Venía el equipo de Martín Lasarte de cosechar cuatro derrotas consecutivas y el entrenador uruguayo mantuvo la confianza en su equipo tipo para cerrar la primera vuelta. Y la Real dominó el juego a su antojo en todo momento, sin necesidad de hacer un fútbol brillante durante 90 minutos aunque sí en algunos pasajes del encuentro. Se adelantó la Real de penalti, claro penalti por mano, demostrando una vez más Xabi Prieto que es infalible desde los once metros. Griezmann anotó un precioso gol de volea antes del descanso y se besó la ikurriña de la managa, lo que generó hostilidad en la grada y le intimidó. El partido lo cerró con dos goles Aranburu, suplente aquel día, culminando dos preciosas contras en las postrimerías del encuentro. Llorente fue, de largo, el mejor realista sobre el césped del Alfonso Pérez, pero no anotó. Sus desmarques y sus asistencias hablaron por él en el último partido completo que jugó antes de su lesión.
La primera vuelta de la presente temporada, la 2011-2012, deparó un aburrido encuentro en Anoeta que acabó con el 0-0 inicial. Fue el cuarto partido sin ganar de la nefasta racha de los ocho que estuvieron los de Montanier sin lograr los tres puntos que ensombreció la primera vuelta y, paradójicamente, el único en el que al menos se consiguió sumar un punto. El técnico francés apostó aquel día por una especie de 4-2-4 que no cuajó. Agirretxe fue de lo mejor en una primera mitad sin calidad pero con mucha batalla. Lo poco que tenía la Real desapareció tras el descanso. El Getafe tuvo sus mejores ocasiones al final del partido, sobre todo con un lanzamiento al larguero de Pedro León ya en el descuento. Luis García dijo que el partido estaba para ganarlo, y vista la inoperancia txuri urdin no le faltaba razón, pero nadie pudo mover el marcador. Como en la primera vuelta, el Getafe fue el primero de los tres rivales a los que se enfrentó la Real en la misma semana. Aquella vez, la Real perdió los tres partidos. El resultado debe ser distinto en esta segunda vuelta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario