La Real de Philippe Montanier se enfrentó en el primer partido al examen de ganar fuera de casa después de no hacerlo en toda la segunda vuelta de la pasada campaña. Lo superó. En el segundo encuentro, el examen de enfrentarse a uno de los grandes, el Barcelona. Lo superó. Y ahora tiene un nuevo examen, el tercero de la temporada en otros tantos partidos: salir con vida del campo de uno de los equipos europeos de la Liga, el Sevilla (sábado, 22.00 horas, Sánchez Pizjuán, La Sexta y autonómicas). Superarlo con sobresaliente, es decir, ganando, supondría igual el inicio de Liga que protagonizó la Real de Raynald Denoueix que casi ganó el torneo en 2003. Palabras mayores. Mayores también por el rival, que es un equipo tan en formación como la Real pero que aspira, casi se puede decir que se siente obligado obligado, a cotas más altas que las que se ha marcado el equipo txuri urdin durante el verano. No se esperan demasiadas novedades con respecto al equipo que remontó al Barça, pero con sólo dos partidos ya tenemos aprendido que a Montanier le gustan las sorpresas. Mal hará el Sevilla si basa su partido en la pobre imagen que dio la Real en su estadio hace sólo unos meses.
Primera sorpresa de Montanier antes del partido del Sevilla: los porteros también rotan. Bravo es el titular indiscutible, pero parece que Zubikarai y Toño se turnarán en el banquillo mientras el chileno esté en condiciones de jugar. En este partido, el suplente será Toño. A la lista de 18 vuele Carlos Martínez tras el partido de sanción que cumplió ante el Barça por su expulsión en Gijón, y lo más normal es que recupere la titularidad. La tercera novedad en la convocatoria es Sarpong. Estos dos ocupan los puestos de Rubén Pardo, que jugará esta semana con el Sanse después de haber estado con el primer equipo en las dos convocatorias previas, y de Carlos Vela, baja de última hora por una lesión en la rodilla. Vale, en todo caso, no fue titular contra el Barcelona, por lo que esto no impediría que se repitiera el once que hizo la proeza ante el campeón de Liga y de Europa hace una semana. La convocatoria, en todo caso, parece arriesgada, con los cuatro laterales (por mucho que Estrada y Cadamuro puedan jugar en otros puestos) y sólo cuatro centrocampistas para tres puestos. Llorente, que aún no ha entrado en una convocatoria al igual que Ansotegi, sigue siendo una ausencia a destacar.
Lo previsto es que Carlos Martínez sea el único cambio en el once de Montanier, aunque el hecho de encarar tres partidos seguidos en una semana, circunstancia en la que la Real de Lasarte siempre naufragó, podría deparar sorpresas en el once de éste o de los dos próximos partidos. Bravo ocupará la portería, previsiblemente con Carlos Martínez, Demidov, Iñigo Martínez y De la Bella en la línea defensiva. Illarramendi estará por delante, y la única duda aparente parece estar en los volantes. Se espera que repitan Mariga (el técnico destacó la necesidad de partidos para que alcance su mejor nivel, después de que contra el Barça decepcionara) y Zurutuza, aunque no se puede descartar que Aranburu reemplace a éste último. Arriba, y ante la ausencia de Vela, todo lo que no sea una línea de tres formada por Griezmann, Xabi Prieto y Agirretxe, sería sorprendente. El 9 ha participado en los cuatro goles de la Real, anotando tres. Griezmann ya se ha estrenado como goleador y Xabi Prieto acumula dos asistencias. Ifrán y Sarpong esperarán su oportunidad en el banquillo. Cadamuro y Mikel González completan el grupo que viaja a Sevilla.
Muchos son los paralelismos entre el Sevilla y la Real en este comienzo de temporada. Ambos equipos han cambiado de técnico, y el banquillo hispalense lo ocupa ahora Marcelino (no sobrepasó en ninguno de los dos partidos que jugó con el Zaragoza ante la Real de Lillo hace tres años en Segunda, aunque sí venció al equipo txuri urdin, con mucha suerte, con el Racing en El Sardinero). Ambos suman cuatro puntos en las dos primeras jornadas de Liga. Ambos han marcado cuatro goles y encajado tres. La Real es quinta y el Sevilla es sexto en la clasificación, ocupando las dos plazas que dan derecho a jugar la Europa League la próxima temporada. Y, sin embargo, las diferencias surgen en el lugar en el que consiguieron sus resultados (la Real ganó fuera y empató en casa frente al Barça; el Sevilla ganó en casa al Málaga y empató fuera ante un Villarreal con diez) y, sobre todo, en las aspiraciones marcadas para esta temporada. La Real ansía crecer, pero su primera meta es la permanencia. El Sevilla juega ya competición europea y hacia donde mira es hacia la Champions. El equipo de Montanier, en todo caso, llega a Sevilla con la moral por todo lo alto después de su gran imagen del segundo tiempo ante el Barça.
Sevilla y Real Sociedad se han enfrentado en 52 ocasiones en la ciudad hispalense, y aunque la maldición del Sur siempre ha estado ahí, no es mala plaza para los intereses del equipo txuri urdin. Once victorias y otros tantos empates ha sacado de sus visitas, todas ellas en Primera División. El Sevilla ganó en las 30 restantes. Sí es cierto que la Real sólo ha empatado en una de las últimas cinco visitas (la de la temporada 2006-2007), y el resto de encuentros se saldaron con victoria local, pero antes de eso cosechó tres victorias en cuatro partidos (con mucho espacio entre estos partidos por los años que pasaron en Segunda primero el Sevilla y después la Real). Los triunfos más holgados en Sevilla fueron los 0-3 de las temporadas 1976-1977 (dos goles de Satrústegui y uno de Gaztelu) y 1983-1984 (Orbegozo, Uralde y López Ufarte de penalti). Es inolvidable el 3-4 de la 49-50 (Epi, dos de Gomes Bravo y Caeiro) o la gloriosa remontada en cinco minutos de la 96-97 (Gracia, Mutiu y De Pedro). La mayor goleada sevillista data del primer encuentro que jugaron en Liga, el 7-2 de la 34-35. El Sánchez Pizjuán será siempre el estadio en el que se fue el primer título de la Real, el de la 79-80, con dos goles de Bertoni.
Con el verano de por medio, pero Sevilla y Real Sociedad jugaron en el Sánchez Pizjuán hace sólo cuatro encuentros de Liga, al final de la temporada 2010-2011. El equipo txuri urdin de Martín Lasarte llegó a Sevilla con la intención de certificar la permanencia en Primera, pero lo hizo con una alineación muy defensiva, extremadamente experimental, con cinco atrás, que no provocó el resultado deseado y abocó a los realistas a jugárselo todo en la última jornada ante el Getafe. A pesar de hacer un partido horrible en ataque, la Real fue capaz de contener al Sevilla en la primera mitad. Pero en la segunda se desmoronó. Kanoute, que se supone que se estaba despidiendo de la afición pero al final continúa en el equipo, marcó en el minuto 53. Y en el 60. El partido estaba cerrado y sentenciado. Agirretxe, prolongando su espectacular media goleadora en los escasísimos minutos de que dispuso la temporada pasada, acortó distancias con un golazo. Pero ni siquiera fue un espejismo, porque la Real nunca pareció capacitada para empatar. El 3-1, obra de Negredo en el minuto 85, terminó de disipar las escasas dudas que se podían tener de que el empate fuera una posibilidad realista.
(Nota. El blog Silbato Sevillista me solicitó hace unos días una colaboración, en la que diera el punto de vista txuri urdin a sus lectores sevillistas, por lo que aprovecho para darle las gracias por su petición. El texto lo podéis leer aquí).
1 comentario:
Muy completa la previa, sólo me queda decir que gane el mejor.
Me encantaría que la Real siguiera todo el año en las posiciones que se encuentra ahora mismo, le tengo un cariño especial por aquello que ya te dije en el correo y aparte porque tengo un par de amigos donostiarras realistas a más no poder y claro, uno se acuerda de las cosas cuando viene la real a jugar aquí jeje
Un saludo!
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