La Real ha logrado la victoria ante el Córdoba gracias a la reacción del técnico y de los jugadores tras el descanso. Una primera mitad de ritmo lentísimo y escasísimas ocasiones de gol encontró una rápida respuesta tras regresar de los vestuarios. Incrementando la velocidad, este equipo tiene mucho más peligro. Y si de velocidad se trata, Nsue es nuestro hombre. Suyo fue el gol y muchas de las acciones más destacadas del partido, a pesar de haber jugado sólo los segundos 45 minutos. Su tanto ha servido para desatascar un partido competido pero de neta superioridad txuri urdin, para sumar la tercera victoria consecutiva en Anoeta, que ahora ya por fin empieza a parecer un fortín de verdad, y para recuperar momentáneamente un liderato que dependerá de lo que hagan mañana Cartagena y Rayo.
Lasarte ha optado por lo que se esperaba más probable antes del partido: un solo cambio en su alineación, De la Bella por Labaka. El equipo parece mejor armado de esta forma, aunque lo cierto es que el lateral apenas ha subido su banda y ha provocado cierto desequilibrio con la constante presencia en ataque de Dani Estrada. La Real sigue teniendo debate abierto en sus laterales. El Córdoba salió bien plantado, con una fuerte presión en el centro del campo (aunque sin peligro efectivo en el juego) y a la Real le costaba mucho sacar el balón jugado. Tanto es así, que el pase largo a cargo de los centrales, y ocasionalmente de Bravo, era la opción preferente para iniciar la jugada. De esta forma, el nivel de juego que se exhibió ante el Salamanca, en el anterior partido en Anoeta, era poco menos que imposible.
Con este panorama, no es difícil de creer que el escaso peligro de la Real en la primera mitad llegara a balón parado (un cabezazo de Ansotegi) o en disparos lejanos, con los que ni Griezmann, ni De la Bella ni Zurutuza consiguieron encontrar puerta y hacer que el portero del Córdoba tuviera que trabajar. Sí lo hizo Bravo, segurísimo y decisivo una tarde más, sobre todo con una mano que evitó que el balón entrase a su derecha por toda la escuadra. El lunes recibe el premio al mejor portero de Segunda de la temporada pasada. Merecidísimo premio. Los andaluces, como la Real, también llevaron casi todo su peligro en las jugadas de estrategia, que no siempre parecieron bien defendidas por la zaga realista. Y en ataque, las jugadas realistas morían pronto, puesto que ni Aranburu ni Zurutuza conseguían llevar el balón hasta el área. Sólo las constantes subidas de Dani Estrada daban cierta sensación de peligro.
En el descanso, Lasarte decidió mover sus fichas. Y si el juego había sido lento en la primera mitad, la solución pasaba irremediablemente por la velocidad. Nsue era el hombre adeucado. En una de estas casualidades que dan la razón a los entrenadores, a los tres minutos la Real marcó. Por las dos variantes con las que la Real salió de los vestuarios, más velocidad y Nsue. Aunque fuera por las molestias que le hicieron ser duda durante buena parte de la semana, el cambio por Zurutuza fue lógico. El canterano es un jugador de mucha calidad, como ya ha demostrado en los partidos ante Numancia y Salamanca, pero tiene en la velocidad su punto débil. Y eso era lo que justo hoy parecía necesitar el equipo.
La entrada de Nsue, por la banda derecha (acabó en la izquierda y allí pareció tener menos protagonismo), desplazó a Xabi Prieto al centro y así gozó el equipo de sus mejores minutos. El 10 txuri urdin hizo una segunda parte formidable y se convirtió en una pesadilla constante para la defensa del Córdoba, con sus conducciones desde el centro del campo y con sus caracoleos dentro del área. Tras uno de ellos, Nsue estuvo a punto de hacer el segundo. Pero las ocasiones más claras fueron para Agirretxe (tras una sensacional jugada de Markel, que ya había saltado al terreno de juego por un Griezmann que volvió a dejar detallitos de clase) y para Bueno, que sustituyó precisamente a Agirretxe. El 9 de la Real sigue siendo el máximo goleador del equipo pero su trabajo no ha tenido en las dos últimas semanas la misma efectividad de otras tardes. Quizá, y aprovechando que lleva cinco semanas sin marcar, sea el momento de darle una oportunidad desde el inicio al uruguayo.
Junto a la lentitud del juego de la primera parte, hay que destacar otro defecto de la Real, que no por conocido deja de ser menos dañino. Los últimos minutos, sobre todo un descuento exageradamente largo, fueron de sufrimiento. El Córdoba no tuvo ocasiones de gol en toda la segunda parte, en la que el dominio txuri urdin fue aplastante. De hecho, la Real no debió llegar con sólo un gol de ventaja a los últimos instantes, de sobra es conocido lo que a este equipo le ha costado cerrar partidos en los últimos años. Pero una vez llegados a ese punto, no había razón alguna para sufrir. El Córdoba no lo estaba provocando. Pero se sufrió. Como en tantas otras tardes de marcadores cortos que ha vivido Anoeta desde que su equipo descendió a Segunda División. Sólo Prieto pareció entender el tempo que requería el partido en ese tramo final, y a base de balones largos hacia la defensa del Córdoba el equipo se limitó a perder tiempo en lugar de matar el partido.
Pese a que el juego no se acercó a la brillantez de otras tardes, la Real sumó de nuevo tres puntos. Dio así una buena respuesta a la bofetada recibida en Valencia, donde el Levante le endosó su primera derrota liguera. El equipo txuri urdin sigue sin perder en su estadio, y esa quizá es la mejor noticia de este primer tramo de la temporada. Además duerme líder, a la espera de lo que hagan mañana los dos equipos que comenzaron la jornada por delante, Cartagena y Rayo. Los resultados del domingo podrían empezar a abrir ya un pequeño colchón, que eso sí todavía no será decisivo. No es mal escenario para afrontar la segunda gran salida de la primera vuelta. Espera el Hércules (que hoy empató en Girona) en Alicante, en un césped en tan mal estado como el que ofreció el Levante hace seis días. Espera un equipo que duerme tercero a dos puntos de los de Lasarte. Espera un aspirante al ascenso. Espera, en definitivo, un reto más para la Real.
2 comentarios:
Lideres en solitario, el sábado había que ganar y se gano, otros años ese partido hubiera acabado en empate.
Acertó con la salida de Nsue, creo que es un jugador muy útil y debería ser titular porque nos aporta mucha velocidad que nos hace falta.
Me esta sorprendiendo Dani Estrada de lateral, esta jugando bien y el centro del gol es magnifico.
Partido complicado en Alicante, duro test para comprobar el potencial de la Real ante uno de los favoritos al ascenso.
Cityground, tienes toda la razón, el empate hubiera sido el resultado en otras temporadas. Quizá eso sea lo mejor de esta Real, que se ha acostumbrado a ganar. No sólo el partido de Alicante, ahora tenemos cuatro partidos muy duros contra los equipos de arriba. A ver si cuando pasen, podemos ilusionarnos ya del todo.
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