Una Copa de ilusión o una Copa de obligación. Ese es el dilema al que hace frente la Real en su debut en la competición del K.O. (jueves, 22.00 horas, Anoeta; Canal + Liga, Gol TV), en el partido de ida de los dieciseisavos de final frente al Almería de Juanma Lillo. Martín Lasarte ya ha anunciado que no acometerá una revolución en el equipo que presente a una hora tan intempestiva de un día laborable (y con la duda de la respuesta que pueda dar la afición por ello), pero sí habrá cambios con respecto al once que venció el lunes al Deportivo. Será la oportunidad de los hasta ahora menos habituales en los onces de Lasarte, algunos de los cuales ya demostraron ante el Depor que tienen ganas de más. La Copa es una competición maldita para el conjunto txuri urdin desde hace ya más de dos décadas y cada temporada se presenta una ocasión de redención que nunca se cumple. Pero está claro que, después de tres años en Segunda, la prioridad es conservar la Primera División como el tesoro que es. ¿Es eso compatible con dar guerra en la Copa? Tendría que serlo. Lo veremos.
Al margen del once que pueda presentar la Real, el primer gran aliciente que presentan las horas previas al partido es el regreso de Juanma Lillo a Anoeta, el técnico que se quedó con la miel del ascenso en los labios en Vitoria. Será la primera vez que visite el estadio donostiarra desde que abandonó el banquillo realista, igual que le sucedió a Lotina hace apenas tres días. El hecho de jugar en Anoeta este partido de ida ha hecho que Lasarte retrase la convocatoria hasta el mismo día del partido. Lo que ya anunció el técnico txuri urdin es que no habrá un once de la Liga y un once de la Copa, en primer lugar porque las bajas lo hacen imposible, pero sí habrá jugadores de los menos habituales. En la rueda de prensa previa al partido, el entrenador uruguayo descartó la presencia de Illarramendi, quien en principio podía contar con una oportunidad en la Copa pero que no está en condiciones de disfrutarla. Aranburu y Zurutuza acabaron el partido contra el Deportivo con molestias, pero no está descartada todavía su presencia ante el Almería.
Zubikarai es el primero de los nombres que se asocia a la Copa y lo más probable es que tenga su ocasión sustituyendo a Bravo. Con las bajas de Sutil y Tamudo por lesión, son varios los nombres que se suman al del portero realista para entrar en el equipo. Dani Estrada podría entrar en lugar de Carlos Martínez y Labaka en el centro de la defensa, aunque no está claro si por Ansotegi o por Mikel González. Éste podría jugar en el lateral izquierdo y dar así descanso a De la Bella, siempre y cuando Lasarte no tire del filial para hacer la convocatoria o el once. Markel parece tener más opciones que Elustondo en el doble pivote, aunque tampoco se puede descartar que se repita la dupla que jugó en Pamplona, Markel-Elustondo. Sarpong parece seguro que ocupará una de las dos bandas. Xabi Prieto y Griezmann parecen jugarse la otra, mientras que Viguera, ante la duda de Zurutuza, parece perfilarse como mediapunta. Y Agirretxe será, probablemente, el delantero titular. Todo está en el aire y todo quedará más definido cuando se conozca la convocatoria, horas antes del encuentro.
La importancia de la Copa es siempre relativa en la competición española. En estas rondas no parece interesar a nadie y sólo es una oportunidad de dar minutos a los suplentes y un motivo para agravar la situación de equipos y entrenadores en problemas. No es el caso de la Real, equipo que, en todo caso, afronta esta competición como un reto histórico. El conjunto txuri urdin no consigue eliminar a un conjunto de Primera División desde la lejanísima temporada 87-88. En las semifinales de aquel año apeó al Real Madrid tras vencerle 1-0 en Atotxa y con el histórico 0-4 en el Santiago Bernabéu. Desde aquellas dos finales consecutivas de las campaña 86-87 (victoria en los penaltis ante el Atlético de Madrid) y 87-88 (derrota ante el Fútbol Club Barcelona), la Copa ha sido una colección de amargos sinsabores. A causa de esos fracasos, y de su paso por Segunda División en menor medida, no compite contra un Primera nada menos que desde la temporada 98-99, cuando cayó eliminada por el Atlético de Madrid. A pesar de vencer por 0-1 en el Vicente Calderón, los colchoneros habían ganado en Anoeta por 1-2.
Real Sociedad - Almería es una eliminatoria de Copa inédita hasta la fecha. De hecho, el equipo andaluz apenas ha visitado San Sebastián en dos ocasiones a lo largo de toda su historia, ambas en Liga, ambas en Primera División, ambas cuando tenía la denominación de Agrupación Deportiva Almería y ambas con el triunfo de la Real. La primera ocasión en que se enfrentaron fue en la temporada 1979-1980, la del récord de imbatibilidad que sigue ostentando la Real. Satrústegui marcó el 1-0 con el que finalizó el partido, el 23º de los 32 que estuvo el equipo de Alberto Ormaetxea sin conocer la derrota. El segundo encuentro se produjo en la siguiente temporada, la del primer título liguero del club. 3-1 fue el resultado final, con dos goles de Satrústegui y uno de Zamora. López Ufarte hizo aquel día un partidazo. Los dos puntos del triunfo colocaron a la Real a cuatro del liderato, que en aquel momento, con cinco partidos todavía por jugarse, ostentaba el Atlético de Madrid.
Esta misma temporada, en la segunda jornada de Liga, la Real ya se ha visto las caras con el Almería, aunque fue en feudo andaluz. En el Estadio de los Juegos del Mediterráneo consiguió el equipo de Lasarte el único punto que ha logrado como visitante. Tamudo adelantó al conjunto txuri urdin, su primer tanto en el equipo, tras un magnífico pase de Zurutuza y culminando un buen primer cuarto de hora de la Real. El Almería comenzó a estirarse y Bravo apareció con intervenciones de mérito. Empataron los almerienses en una contra que el centro del campo realista consintió con demasiada facilidad. Pero la Real se adelantó de nuevo con el primer gol de Sutil en la Real, día de estrenos, éste a pase de Aranburu. El Almería no inquietó a Bravo en la segunda parte, pero logró el premio del empate en el descuento. Ulloa, aprovechando un balón bombeado que Mikel González midió mal, sentó a Ansotegi y llevó la igualada al marcador. La Real lograba su cuarto punto en dos partidos. Desde aquel día, todavía no ha vuelto a sumar lejos de Anoeta.
1 comentario:
Me lo tomo con ilusión, nos hemos llevado muchos palos en la Copa pero alguna vez nos tocara pasar alguna ronda. Me parece bien que haga cambios pero que no saque a los once reservas, es bueno que haya 4 o 5 titulares en el equipo.
Vaya recuerdos de las finales del 87 y 88, en el 87 en un partido muy emocionante y ganando cpor los penaltis al Atleti, y en el 88 siendo favoritos ante el Barca, con el Bernabeu que parecía Atocha pero jugando horrible y perdiendo. Ese 0-4 en las semifinales contra el madrid es de los mejores partidos de la historia de la Real.
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