La Real de Anoeta, la Real de verdad. Eso es lo que Martín Lasarte espera ver esta jornada en el encuentro ante el Deportivo (lunes, 21.00 horas, Anoeta; Gol TV y PPV), la Real que haga olvidar su cara más apática, esa que está ofreciendo fuera de casa. Porque el equipo, como local, presenta números e imagen casi inmejorables. Dos victorias en tres partidos, ante Villarreal y Espanyol, y la inmerecida derrota ante el Real Madrid. El partido tiene la peligrosa connotación de disputarse en lunes, fecha que no le ha traído demasiada suerte al equipo txuri urdin, y de ser la primera visita como entrenador rival de Miguel Ángel Lotina, quien ocupó el banquillo realista en la temporada del descenso. No es momento de nerviosismos (esta Real está muy por encima de aquella que bajó a Segunda), pero el partido se antoja importante porque el rival está en puestos de descenso y a tiro de la Real si vence en Anoeta. Una buena prueba para medir el potencial del equipo.
La convocatoria de Martín Lasarte no da muchas pistas sobre el once que se desplegará sobre el césped en esta siempre atípica fecha de lunes, porque los 18 elegidos son los mismos que se desplazaron a Valencia para medirse contra el Levante, con la única modificación, la ya prevista, de Agirretxe por el lesionado Tamudo (cuya fecha de reaparición, como la de Sutil, sigue sin conocerse con exactitud, aunque el caso del jienense es más preocupante). El canterano, máximo goleador de la pretemporada, vuelve a una lista después de cuatro jornadas de ausencia, con sólo quince minutos jugados, y esperará su oportunidad en el banquillo. Llorente se perfila como el delantero titular en la vuelta del técnico uruguayo a su esquema más habitual, el 4-2-3-1. Lo más probable es que Zurutuza regrese al once titular en la mediapunta. No se descartan más cambios, pero la próximidad del partido de Copa, el próximo jueves ante el Almería en Anoeta, y el buen rendimiento que el once tipo de Lasarte ha dado en el feudo donostiarra hacen pensar que lo más probable es que se repita el equipo que todos tenemos en mente.
De esta forma, jugarían Bravo en la portería; Carlos Martínez y De la Bella en los laterales (sigue sin haber suplentes específicos para ninguno de los dos en la convocatoria); Mikel González y Ansotegi en el centro de la zaga; Diego Rivas y Aranburu en el doble pivote; Griezmman y Xabi Prieto en las bandas, con Zurutuza por el centro y Llorente sólo en punta. Aunque esta alineación tiene muchas posibilidades de ser la escogida por el técnico, Sarpong sigue llamando a las puertas de la titularidad, después de intervenir decisivamente en los dos últimos goles marcados por la Real, ante el Levante y ante el Espanyol, y es un jugador que puede desenvolverse en ambas bandas. No hay que olvidar que, a pesar de su calidad, Xabi Prieto no está pasando por su mejor momento. No es descartable que Lasarte busque también un relevo en el doble pivote, aunque es más probable que la oportunidad para Elustondo o Markel llegue en el partido de Copa. Lo mismo se puede decir de Labaka en el centro de la defensa. Viguera completa la lista de 18 para el encuentro ante el Deportivo.
Tras tres derrotas consecutivas lejos de Anoeta y sólo un empate logrado en Almería, los partidos de casa se han convertido ya en finales para esta Real, una importancia que admitió el propio Lasarte en rueda de prensa. En casa los números son buenos, seis de nueve puntos posibles, un gol en los tres partidos y sólo el Real Madrid fue capaz de anotar en Anoeta. El recibimiento a Lotina será una incógnita. Sin cuentas pendientes entre la plantilla, porque los jugadores que quedan en ella son tan responsables como el técnico de aquel descenso, la respuesta la dará la afición. No sería de extrañar la división de opiniones o incluso un manto de indiferencia que diluya el pasado txuri urdin de Lotina antes y durante el partido. Jugar en lunes es otra piedra más en el camino. Será el segundo partido de esta temporada, después del empate a dos en Almería y la mala estadística histórica en el primer día de la semana. Curiosamente, el Depor fue rival de un partido en Anoeta jugado en lunes, en la temporada 97-98, y éste acabó con empate. Kovacevic falló un penalti en el último minuto que, de haber sido gol, al final habría dado a la Real el subcampeonato y la clasificación por primera vez a la Champions League.
La historia da un balance favorable a la Real, pero los datos generales son muy matizables. En total, el Deportivo ha visitado San Sebastián en 36 partidos de Liga, con 18 victorias locales, seis empates y doce triunfos del equipo gallego. El balance en Primera es más ajustado que en Segunda, con 14 victrorias y diez derrotas en la máxima categoría y cuatro victorias y dos derrotas en la de plata. Los seis empates llegaron en Primera. Pero en los partidos celebrados en Anoeta, desde su inauguración en 1993, la estadística es peligrosa para los locales. La Real sólo ha vencido en cuatro de los 14 encuentros disputados, mientras que el Depor se llevó cinco victorias y otros tantos empates (casualmente, todos ellos a un gol). El último triunfo txuri urdin llegó en la campaña 2005-2006, por 2-0, con tantos de Kovacevic y Jauregi, ante un Depor al que el árbitro obligó a jugar con una camiseta roja de la Real por esa nunca bien razonada coincidencia de colores. La victoria realista más abultada fue en la temporada 51-52, por 7-1 (dos goles de Pérez, Igoa y Alsúa, y uno de Barinaga). El Deportivo ganó 1-3 en cuatro ocasiones, dos en Primera (68-69 y 93-94) y dos en Segunda (39-40 y 63-64).
La última vez que Anoeta acogió un duelo entre Real Sociedad y Deportivo fue en la temporada 2006-2007, la del descenso txuri urdin, y el partido acabó con victoria visitante por 0-1. Hizo un buen partido aquella Real de Lotina, pero Germán Herrera dilapidó ocasiones casi imposibles de fallar que le dejó en bandeja Kovacevic. Savio hizo un partidazo. El Deportivo de Caparrós hizo un partido mediocre, pero ganó. Sólo llegó una vez a la portería de Bravo y la metió. Fue un balón colgado al área desde lejos en el que la defensa de la Real se asustó, reculó en exceso, eliminando toda capacidad de intervención a Bravo. El pase de gol fue con la mano, pero el gol valió. La grada estalló, con timidez pero estalló y sus objetivos fueron la directiva presidida por Fuentes, Rekarte y Herrera. La derrota ante el Deportivo fue el séptimo de los ocho partidos sin ganar que encadenó la Real entre enero y marzo, la tercera derrota consecutiva de este periodo. El equipo txuri urdin se quedaba con catorce puntos y la imposible misión de ganar nueve de los catorce partidos que quedaban para salvarse. Sólo ganó seis y empató tres y le faltaron seis puntos, esas dos victorias que completaban las nueve ansiadas, para seguir en Primera.
2 comentarios:
Lo cierto es que este partido es más importante de lo que parece; por un lado se pueden recobrar las sensaciones positivas del principio de liga y por otra quitarle moral a un depor que este año luchará por no bajar; un rival directo visto lo visto hasta ahora. Creo que una derrota puede hacernos entrar en una mala dinámica. Aupa.
Espero volver a ver a la Real que juega normalmente en casa, un equipo firme atrás y que genera buenas ocasiones, una derrota hoy nos podría hacer mucho daño.
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