No se puede esperar más. La Real está obligada ya a dar el necesario salto de calidad en los dos partidos que quedan antes de que acabe el año. El primero de ellos (domingo, 17.00 horas, Escribano Castillo, sin televisión) ha cobrado una especial importancia por la situación clasificatoria del Granada 74, tres puestos y otros tantos puntos por encima del equipo que dirige Chris Coleman. La victoria es además importante porque sólo sumando de tres en tres se puede mirar definitivamente hacia arriba. Y la Real todavía no se ha acostumbrado a este ritmo. Suma seis empates de sus últimos siete partidos y sólo una victoria en los últimos nueve. El propio técnico galés ya dijo que sumar los seis puntos que quedan en este nefasto 2007 colocarán a la Real entre los cinco primeros y, ya en serio, ya de verdad, con auténticas opciones de luchar por el ascenso.
Los fichajes que Iñaki Badiola quiere anunciar el próximo día 26 de cara a las elecciones del 3 de enero, para los que hoy no tiene rival, no jugarán este domingo. Tampoco se pondrán sobre el campo ni las prometidas inversiones, ni el capital chino, ni las subvenciones de las instituciones. Tampoco jugará el Consejo presidido en su día por Miguel Fuentes, ni siquiera el de Astiazarán. Ni tampoco se moverá el balón sobre el césped de ese olvidado proyecto que fue Gipuzkoarena. No. Pero de todo eso estamos hablando más que de lo que pueda hacer la Real el domingo. Que nadie se distraiga del objetivo, que sigue siendo devolver a la Real a Primera lo antes posible. Sí, todo lo demás es importante, es imprescindible saber qué ha pasado en el club en los últimos cinco años, pero más importante todavía es ganar el domingo. Y el siguiente. Y en las próximas jornadas. Y volver a Primera. Donde debemos estar.
Chris Coleman, poco amigo de los cambios, no dejó muy claro qué once pretende sacar aunqeu sí parece seguro que alguna modificación habrá con respecto al conjunto que empate en Anoeta hace seis días contra el Cádiz. Parece probable que Gari Uranga vuelva al equipo titular, pero queda por saber si lo hará como delantero en lugar de un Delibasic que sólo ha anotado un gol en lo que llevamos de Liga o si como mediapunta en lugar de Gorka Larrea, que tras dos tiempos muy buenos y una lesión volvió sin mucha fortuna a jugar la semana pasada ante el Cádiz. La otra novedad que podría presentar el once txuri urdin es el regreso de Gerardo al lateral izquierdo en lugar de Castillo. Es poco probable que haya cambios en el resto del once, por lo que la Real podría presentar un equipo sin extranjeros formado por nueve canteranos más Gerardo y Garitano.
Los cambios obedecen a una lectura diferente de este partido, motivada por el hecho de que el campo más pequeño de la Segunda División es el del Granada 74, 100 metros de largo por 62 de ancho, más pequeño incluso que Ipurúa. No sería de extrañar que se viera un partido muy parecido al que jugó la Real contra el Eibar en la segunda jornada (y que se saldó con la victoria para los realistas por la mínima, con un gol de penalti conseguido por Gerardo). O tan parecido a los cuatro últimos partidos como local del Granada 74, tres 1-0 y un empate sin goles. La sorpresa sería un partido con muchos goles, teniendo en cuenta además que la Real viene de cosechar dos empates a cero consecutivos y tiene serios problemas para crear ocasiones y marcar goles. Con las dificultades que tiene la Real para generar fútbol, quizá este pequeño campo sea ideal para el cuadro txuri urdin en este momento de la temporada. Si no, las reducidas dimensiones serán otra más de las excusas que hemos oído en cada partido que no ha ido bien.
Los granadinos, con la base del Ciudad de Murcia que se quedó a las puertas del ascenso la pasada temporada, están haciendo una buena campaña y están ahora mismo a sólo dos puntos de los puestos de ascenso. Están cimentando su éxito en buena medida en casa, ya que sólo han perdido un encuentro (ante el Tenerife, próximo rival de la Real en Anoeta). Como local han sumado quince puntos, por los once que ha logrado el cuadro realista en su estadio. El Granada 74, aunque también se ha dejado tres empates en casa, está invicto como local desde el 1 de septiembre. El equipo andaluz ha tenido partido de Copa del Rey esta misma semana. El Atlético de Madrid ganó 1-2 en el Escribano Castilla de Motril. Una victoria de la Real mañana podría servir para adelantar al Hércules (que recibe al Málaga, segundo en la tabla) e igualar a puntos al propio Granada 74 y al Celta (que visita Cádiz).
El Granada 74 como tal ha nacido esta misma temporada, por lo que no hay enfrentamientos anteriores contra la Real. Por cercanía geográfica se pueden recordar los partidos contra el Granada C.F., y el balance, como con casi todos los equipos del sur, es desolador para el conjunto txuri urdin. En Primera han disputado 14 encuentros y 11 se han saldado con victoria local. La Real sólo se trajo una vez la victoria de Granada, y fue en la temporada 69-70. Urreisti en dos ocasiones y Arambarri pusieron el 0-3 definitivo. En Segunda, el balance es aún peor, tres partidos y tres derrotas. En la temporada 40-41, Granada y Real Sociedad jugaron dentro de la fase de ascenso. Los andaluces ganaron los dos partidos, pero ambos equipos acabaron volviendo a Primera. ¿Se repetirá la historia allá por el mes de junio?
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