El discurso empieza a sonar al de semanas anteriores, pero esta vez es más real que nunca. La Real se enfrenta a otra final (sábado, 20.00 horas, Anoeta, PPV), quizá la más importante. Porque la victoria supondría colocarse a seis o siete puntos de la salvación, una distancia impensable para muchos hace sólo un par de jornadas. Los tres puntos son imprescindibles en un partido que va a suponer una apuesta a todo o nada. Más de un jugador ha hablado de que todas las ilusiones se acaban si no se consigue la victoria.Si se lograran los tres puntos, cabría pensar en otro objetivo más: ganar por dos goles de diferencia e igualar el gol-average particular con el Levante, rival directo por la salvación que venció 2-0 en la ida. Una victoria por dos goles dejaría un hipotético empate con los levantinos en manos del average general, que hoy perjudica a los realistas pero sólo por tres goles. Hasta el momento, la Real tiene perdido el average con el Athletic de Bilbao (1-1 en la ida, 0-2 en la vuelta) y ganado al Mallorca (0-0 en Son Moix, 3-1 en Anoeta). Quedan todavía partidos importantes ante rivales de la zona baja como el Nastic, el Celta o el Betis.
Como de costumbre, es una incógnita el equipo que sacará Lotina. Todos los jugadores disponibles, 21 (Elustondo y Estrada vuelven al Sanse para esta jornada), forman la convocatoria. No están Jesuli (que podría no volver a jugar en toda la temporada), Skoubo y Gari Uranga. El resto, entran todos. Dos son las principales dudas que hay. La primera, Riesgo o Bravo en la portería. El de Deba cuajó un buen encuentro en Villarreal, pero Lotina siempre ha apostado por el chileno cuando ambos han estado disponibles. El técnico ha asegurado que ya ha decidido quién jugará, pero no lo ha comunicado a la prensa.
La segunda duda es la delantera. Saldrán dos atacantes ("bueno, uno y medio, mañana lo veréis", dijo Lotina en su rueda de prensa del viernes) y los tres disponibles se juegan esos dos puestos: Darko, Díaz de Cerio y Herrera. El técnico ha dicho que aquí si tiene dudas que despejará a última hora. El resto del equipo, a priori, se parecerá mucho a lo que se ha visto en las últimas jornadas en casa. No obstante, hay que tener en cuenta que uno de los tres mediocentros que salió en Villarreal (Aranburu, Rivas, Garitano), tendrá que quedarse en el banquillo por la presencia de ese segundo delantero.
Anoeta se volverá a llenar, en una muestra más de que la afición, confíe o no en la salvación, está con el equipo. Si ahora el equipo responde a esa confianza con otra victoria en casa (sería la segunda consecutiva y consolidaría una racha de siete puntos de nueve posibles en las últimas tres jornadas) seguro que muchos más realistas comienzan a creer que es posible seguir en Primera División. Lotina insistió en que seguirá trabajando sea cual sea el resultado, pero también sabe, como todos los aficionados de la Real, que dejar que el Levante se escape a doce puntos puede ser la sentencia a falta de la esperanza que puedan dar las matemáticas.
El partido de ida se jugó de milagro. Las lluvias dejaron el terreno del Ciudad de Valencia casi inutilizado. Curiosamente, un par de días después sí se suspendió el partido de Copa ante el Atlético de Madrid, pero Fernández Borbalán (que ha tenido actuaciones muy buenas y muy malas con la Real), el mismo árbitro que pitará este sábado, decidió que se jugara. La Real decidió apostar por el toque de balón el único día que el campo no lo permitía y el Levante se adaptó mucho mejor. Como ya se ha dicho, el resultado fue de 2-0. Marcaron Meyong Zé y Curtois. Aquel fue el segundo partido de Lotina en el banquillo realista y la segunda derrota. La Real, por aquel entonces, todavía no había logrado una sola victoria y apenas tenía dos puntos en nueve jornadas.
En la campaña pasada, Real Sociedad y Levante no se enfrentaron porque los valencianos estaban en Segunda. El anterior encuentro que la Real jugó en casa contra el Levante fue hace dos temporadas, en la primera jornada de Liga. Los azulgranas sacaron un empate a uno de Anoeta, en el debut de José María Amorrortu como técnico realista. Harte adelantó al equipo visitante en una falta directa en la que Riesgo pudo hacer más, y Nihat igualó el marcador al poco de iniciarse la segunda parte.
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