La Real afronta nuevos retos con el partido ante el Elche (domingo, 17.00 horas, Anoeta; Canal + Liga y Gol TV). Afronta el reto de ganar un partido pese a las ausencias, ya que faltarán tres titulares habituales y entre ellos su jugador más destacado, Xabi Prieto, que hasta ahora había estado siempre disponible. Afronta el reto de seguir mejorando esa maravillosa estadística que alcanza ya la cifra de ocho triunfos consecutivos como local y diez sin perder. Afronta el reto de alcanzar los 45 puntos al final de la primera vuelta, una marca que nadie ha sido capaz de mejorar desde que la Segunda División tiene 22 equipos. Y afronta el reto, de nuevo, de defender el liderato y ampliar la ventaja de diez puntos con respecto al cuarto clasificado. Muchos retos para esta Real. Pero esta Real, precisamente esta Real, está demostrando que le van los retos.
El mayor contratiempo con el que se ha encontrado esta semana Martín Lasarte es la baja de Xabi Prieto, que todavía nadie sabe cuántos partidos se va a perder (las previsiones más optimistas hablan de dos, las más pesimistas de seis). Pero no es la única. Labaka también se cae de la lista de 18 escogidos y Dani Estrada sigue también de baja. Tres jugadores que forman parte evidente del once ideal de la primera vuelta no estarán mañana sobre el césped de Anoeta. Y especial relevancia cobra la ausencia de Prieto, no sólo por el papel decisivo que esta teniendo esta temporada (ocho asistencias y cuatro goles), sino porque junto con Estrada deja al entrenador sin la banda derecha que ha usado en la primera vuelta casi en exclusiva.
Dadas estas ausencias, el once inicial que podría saltar al césped de Anoeta sería el formado por Bravo; Carlos Martínez, Ansotegi, Mikel González, De la Bella; Diego Rivas, Elustondo, Nsue, Zurutuza, Griezmann; y Agirretxe. Carlos Martínez jugará sin duda su segundo partido como titular (con la obligación de seguir creciendo para ser una alternativa creíble y fiable cuando Estrada vuelva de su lesión) y, ante la ausencia de Labaka, lo normal es que Mikel González vuelva al centro y deje la banda izquierda para De la Bella (Sarasola verá el partido desde la grada). En el banquillo espera el central Esnaola, que entra por fin en una convocatoria pero que tiene muy difícil, por no decir imposible, encontrar un hueco en el once inicial.
Con los mediocentros claros, las dudas están en dos de los tres puestos del centro del campo ofensivo. Griezmann parece seguro. Zurutuza y Nsue son la apuesta más probable para los dos huecos restantes, pero no hay que descartar que Aranburu pueda entrar, bien en la mediapunta, bien en la banda derecha. Menos opciones tiene Sergio y, dado que el partido es Anoeta, muchas menos tiene Markel. Aunque no es un jugador de banda, como él mismo se encarga de decirlo cuando tiene oportunidad, Nsue jugaría por la derecha. La llegada de Songo'o viene a suplir esa carencia que tenía la Real en su plantilla, la ausencia de un recambio de garantías para Xabi Prieto. Arriba parece más factible que continúe Agirretxe y que Bueno espere en el banquillo. Johantan Estrada también aguardará oportunidades desde la suplencia.
La jornada comienza para la Real desde la mejor de las posiciones posibles. Es líder, con dos puntos de ventaja con respecto al segundo, un Hércules que juega en casa ante el Real Unión (no vendría mal un favor de los vecinos), y con diez de diferencia con respecto al cuarto, el Numancia que recibe a un necesitado Cádiz. El equipo de Martín Lasarte está en disposición de igualar el récord de puntuación en una primera vuelta de la Liga de Segunda a 22 equipos, y para ello tiene que vencer. De sumar tres puntos, habría cerrado una primera vuelta intachable, invicto en Anoeta y con sólo dos derrotas lejos de su estadio, la última de ellas en Alicante, nada menos que diez jornadas atrás, las mismas que ya lleva sin perder el conjunto txuri urdin. Con estos números, hay quien piensa que está próximo el día en que la Real no gane en Anoeta. ¿Por qué? ¿Quién dijo miedo?
De contar en algo durante los partidos, la Historia daría la victoria a la Real, pues el Elche jamás ha ganado en San Sebastián. Entre Primera y Segunda, los ilicitanos han rendido visita al conjunto txuri urdin en 16 ocasiones, de las cuales nada menos que 13 acabaron con triunfo realista. La victoria más abultada fue el 5-0 de la temporada 67-68, tras el ascenso de Puertollano, con tres goles de Arambarri, uno de Canós en propia puerta y otro más de Arzak. Los tres empates que ha cosechado el Elche siempre han sido sin goles y el último de ellos en Primera División data de la temporada 76-77. En Segunda la estadística es algo más pareja. Sólo dos veces se han visto las caras Real y Elche, con una victoria local y un empate. La primera vez que se vieron, los realistas ganaron por 2-1.
La segunda fue la temporada pasada y el encuentro finalizó con el 0-0 inicial. Como en esta campaña, fue el partido que cerró la primera vuelta. Pero qué distinto se veía todo entonces. La Real finalizó la primera mitad del campeonato con 32 puntos. Diez menos de los que tiene hoy, antes de ese último partido. Los de Lillo hicieron un mal encuentro y estuvieron lejos de la victoria. Bien es cierto que los tres puntos se pudieron quedar en Anoeta de haber entrado un magnífico cabezazo de Abreu, que debutaba aquel día con la camiseta txuri urdin, pero Willy Caballero demostró una vez más lo bien que se le da jugar contra la Real. Los ilicitanos tuvieron sus escasas ocasiones en la primera mitad y el 0-0 pareció justo. Y aunque sólo hace un año de aquello, eran otros tiempos. Ahora son más felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario