La vida es sueño y, por una vez, el sueño lo protagoniza la Real. Líder otra vez, una victoria cómoda y amplia, incluso sin jugar un buen partido. Cuatro goles realistas, lo que no se producía en Anoeta desde marzo de 2008. Se acaba la racha negativa en los derbis en Anoeta. Seis victorias consecutivas como local. Y hoy han jugado ocho de los diez primeros de la clasificación y sólo han ganado tres: el equipo txuri urdin, el Numancia y el Salamanca. ¿Se puede pedir más? Quizá sí, quizá ahora es cuando llegamos a ese momento en que el equipo es tan solvente que acabaremos pidiéndole más. Que además de ganar juegue bien. Que se produzca el ascenso y que el éxito llegue incluso a algunas jornadas del final de la Liga. Esto es un sueño, porque las dos primeras temporadas en Segunda se acercaron mucho más a la pesadilla. Ahora llega el momento de disfrutar.
Lasarte alineó dos novedades en el once. Una de ellas ya estaba prevista, pues De la Bella sustituyó al sancionado Mikel González. El lateral catalán sigue sin dar algo que justifique su fichaje y que le ponga por delante no ya de Sarasola, sino de Morgado, el lateral del Sanse fichado a bombo y platillo al Alavés en la era de Badiola. El otro cambio fue la suplencia de Aranburu por primera vez en toda la temporada desde que regresó de su lesión, una suplencia adecuada porque en los últimos partidos no estaba dando el nivel que se espera de uno de los pocos jugadores realistas que ha tenido trayectoria en Primera e incluso ha disputado competiciones europeas. Su sustituto fue Nsue, y aportó exactamente lo que se espera de él: velocidad y gol. Es un buen fichaje y lo sigue demostrando. Suyo fue el cuarto gol de la tarde, bien es cierto que gracias a la colaboración del portero del Real Unión, que salió de forma alocada y sin posibilidad de llegar al balón.
Lo cierto es que los irundarras han colaborado decisivamente en la victoria de la Real y ese cuarto gol fue sólo una muestra, quizá la menos decisiva pues el partido ya parecía casi decidido a pesar del pequeño empuje con el que el Unión salió en la segunda mitad. Pero fue un equipo muy blandos en defensa, que además de concedir el cuarto gol a Nsue también facilitó los dos (¡dos!) que anotó Ansotegi en sendos corners. El primero llega tras recoger Elustondo en la línea de fondo el rechace de un primer saque de esquina que él mismo había botado. La pasividad de la defensa del Unión sólo ha sido comparable a la tibieza del marcaje a Ansotegi en el posterior remate. El segundo gol del central realista llegó al remachar en el segundo palo una espléndida dejada de cabeza desde el primero de Xabi Prieto. Pero la marca de la defensa visitante al jugador más alto de la Real, y uno de los más peligrosos a balón parado, se puede calificar de muchas formas menos de buena.
Para llegar a esa situación en la que la Real se ha permitido el lujo de golear, el delantero hizo su trabajo previamente. Bueno ya está donde se le esperaba. Con el que ha anotado hoy en el minuto nueve de partido, el uruguayo lleva ya cuatro goles, pero su eficacia no se limita sólo a eso. Sigue forzando una gran cantidad de faltas, lo que da ocasiones a la Real de poner en práctica la estrategia (hoy dos goles de esta forma, aunque los dos de córner), y hoy incluso ha dejado con diez jugadores al Real Unión gracias, también hay que decirlo, a un árbitro tarjetero que no ha querido saber nada dentro de las áreas (y eso le ha llevado a no pitar un claro penalti sobre Zurutuza en la segunda mitad, cuando la victoria txuri urdin ya era clara e inevitable; hay una jugada dudosa de Dani Estrada en el área realista que el entrenador irundarra solicitó, pero que no queda claro si es penalti).
El buen momento del uruguayo no sólo será bueno para él, sino que seguro que despierta lo mejor de Agirretxe, ahora limitado a los últimos minutos del partido (lo que también dio frutos ante el Cartagena). Y seguro que dentro de poco Lasarte tendrá la opción de alinear a los dos. Pero a falta de más goles de los delanteros, que llevan buenas cifras, la gran noticia que deja el partido es la pegada txuri urdin. Y, ojo, siete goles en dos partidos en los que apenas se ha mencionado a Griezmann. Cuatro goles en Anoeta son un bien que sólo cabe calificar de precioso. La temporada pasada, la Real no fue capaz de marcar más de dos goles en ninguno partido. En ninguno. Y en el primer año de esta etapa en Segunda sólo llegó a los cuatro en dos ocasiones, ante Las Palmas y Xerez. La Real, como demostró en Vallecas, tiene mucha pegada. Y muchos jugadores capaces de marcar gol.
Son momentos de euforia, pero Lasarte sigue teniendo trabajo. Atrás ha habido algunos desajustes, quizá parecidos a los que en Vallecas costaron los goles del Rayo, pero la gran diferencia de calidad entre el equipo madrileño y el irundarra es lo que ha determinado que hoy la Real no sufriera. Bravo apenas ha tenido que hacer una o dos intervenciones de relativo mérito, pero desde luego nada para destacar. El Real Unión ha sido un equipo blandito e inofensivo, que con este 4-1 ha caído a puestos de descenso. También de blandita se puede calificar a la defensa de la Real en el único gol del Unión, obra de Juan Domínguez, un gol además que no debe encajar el equipo nunca, en el descuento de la primera mitad. Y una lección para aprender es la tarjeta absurda que se ha llevado Labaka ya en el tramo final del partido, por hacer una faltita en el centro del campo. Hoy no cuenta, pero cuando se le sancione nos acordaremos.
Por supuesto, el fútbol de la Real no ha sido brillante, y las grandes noticias están en que Zurutuza siga sumando minutos y en el debut esta temporada de Carlos Martínez, que por fin ha dispuesto de los minutos finales para que Lasarte probara a Estrada en el extremo. Pero eso es lo que hace a un equipo grande, y más en Segunda División. Si no se juega bien, hay que ser capaces de sacar adelante los resultados. Porque cuando sí se juega bien, las victorias llegarán casi siempre. No menospreciemos este logro de la Real, que lo ha buscado sin conseguirlo más que a rachas en sus dos primeras temporadas en Segunda. No es tan fácil ganar partidos en Segunda. El Cartagena y el Rayo han perdido. El Córdoba, el Hércules y el Elche han empatado. Salamanca y Numancia han ganado en casa por la mínima. La Real ha goleado. Y ha conseguido la sexta (sí, sí, la sexta) victoria consecutiva en casa. Queda mucho, pero la vida, ahora, por fin, es sueño. Soñemos, que junio está cada vez más cerca.
4 comentarios:
Aupa!!
Muy buena crónica, eres un periodista deportivo con buen estilo. Acabo de venir de Anoeta, y ha sido uno de los mejores partidos de hace tiempo. Primero, porque hemos ganado fácil (3-0 en el 1º tiempo) y segundo porque ha habido un ambientazo en las gradas, animando sin parar. El Unión, como no mejore, a segunda B de cabeza, y la real, como siga así de firme, se va a ver con una ventaja importante para febrero...
Real!!!
Gran triunfo y por fin nos llevamos un derbi, Bueno empieza a responder y Ansotegui esta haciendo una temporada espectacular.
Lideres en solitario.
Kaixo
¿Se puede pedir más?
Se puede pedir más. Buena pregunta Juan. Pues claro, podemos pedir, que este martes, en las categorías femeninas de hockey y futbol, salgamos también líderes. Y todo ello gracias a que jugarán con las líderes de sus grupos, y ahora van segundas. Si ganan primeras. Recordar, este martes 8 a las 12 en Zubieta contra el Atheltic. Y en Bidebieta-Aiete contra el Club de Campo. Los que puedan ir, que se lleven nuestro animo e ilusión.
Goazen Neskak
Musu bat
Peloncio, muchas gracias, espero seguir viéndote por aquí, en esta casa de todos los seguidores de la Real. Ojalá tengamos esa ventaja en febrero, ojalá...
Cityground, sí, Ansotegi se está ganando a pulso todos los elogios. Y Bueno cada día me gusta más.
Luis, pues una pena que las chicas no consiguieran el liderato, pero gran temporada la de los dos equipos, del de fútbol y del de hockey.
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