Dado que el equipo ha hecho un pequeño stage en Valencia tras jugar en Barcelona el miércoles, la convocatoria ya es conocida. Imanol tiene a su disposición los mismos hombres que se llevó para el partido en el Camp Nou, con una sensible baja, la de Januzaj, que se rompió en el choque ante el Barça. Por contra, da la sensación que Oyarzabal sí podría llegar para este partido, aunque habrá que ver si Imanol arriesga con él viendo el calendario que todavía le queda al equipo antes de que acabe el año y pensando también en la recién sorteada Supercopa de enero. Illarramendi sigue en el grupo, pero si nos atenemos a lo que dijo el técnico txuri urdi no será este el partido de su reaparición. Y, por supuesto, habrá que tener muy en cuenta la presencia de González de Zarate y Robert Navarro, este último después de estrenarse con la camiseta del primer equipo en el partido del Camp Nou. Moyá, Aritz, Guridi y Sangalli completan la lista de bajas.
No es nada fácil saber qué equipo dispondrá Imanol para esta jornada. Sí podemos dar por seguro que Remiro estará bajo palos, pero a partir de ahí todo es una incógnita, y más teniendo en cuenta que el miércoles espera el Atlético de Madrid. Lo normal sería que Aihen y Zaldua ocupen las bandas, con Le Normand y Zubeldia repitiendo en el centro. Zubimendi, exhibición la suya en el segundo tiempo ante el Barcelona, tiene más papeletas para el centro del campo, con Merino y Roberto López probablemente acompañándole. Entre Portu, Barrenetxea y Merquelanz se jugarán dos plazas e Isak puede contar con una nueva titularidad para romper el mal fario que le está persiguiendo esta temporada. De ser así, en el banquillo estarían Ayesa y Marrero como guardametas, Sagnan, Gorosabel, Monreal, Illarramendi, Guevara, González de Zárate, Robert Navarro, Oyarzabal, Bautista y Willian José.
Tras la derrota en el Camp Nou, la Real perdió el liderato por golaverage. Es segunda con 26 puntos, los mismos que tiene el Atlético de Madrid, ahora primero, aunque con tres partidos más que los colchoneros. El Levante es decimoctavo con doce puntos, a uno de la salvación. La Real perdió en Barcelona su primer partido como visitante del curso, pero sigue siendo junto al Real Madrid el que más ha sumado a domicilio, 14 puntos, con cuatro victorias y dos empates. El equipo txuri urdin, eso sí y a pesar de ser el máximo goleador del campeonato, llega a esta jornada después de cuarto partidos sin ganar, tres empates y la mencionada derrota ante el Barça. El único partido que ha ganado el Levante en casa ha sido el último, 3-0 al Getafe, después de sumar tres empates y una derrota en su campo. Ese encuentro, de hecho, es el único en el que ha sumado tres puntos de los diez últimos que ha jugado. En casa ha marcado seis goles en cinco partidos, la mitad de ellos en el del Getafe, pero solo ha recibido cinco.
La historia dice que la Real solo ha sido capaz de ganar en dos de sus once visitas al campo del Levante que se han producido en Primera División, aunque también es cierto que solo cayó derrotada en una de sus últimas seis apariciones en ese escenario, con dos victorias y tres empates en ese periodo. Uno de esos triunfos es precisamente la mayor goleada conseguida por el conjunto txuri urdin, el 0-4 de la temporada 2015-2016 con Vela por partida doble, Agirretxe e Illarramendi como goleadores. El 3-0 de la campaña 2017-2018, la última derrota realista allí, es el peor correctivo que ha recibido. La Real ha marcado al menos un gol en nueve de sus visitas al Levante en la máxima categoría. En Segunda División se enfrentaron en cuatro ocasiones, con igualdad absoluta: dos victorias para cada equipo. Y para la estadística también hay que contar el cruce en la fase de ascenso de la temporada 1939-1940, con cómoda victoria para la Real por 0-3.
El último precedente, el de la temporada pasada, la 2019-2020, fue ya en el periodo sin público en las gradas. La Real, a la que le estaba costando muchísimo sacar resultados, vio cómo el partido se le ponía pronto de cara. En el minuto 12, Isak conectó un maravilloso remate de espuela tras un pase de Oyarzabal desde la banda izquierda ante el que nada pudo hacer Aitor Fernández. Casi en la siguiente jugada, en el minuto 16, Morales empató aprovechando un despiste de los centrales realistas, que le permitieron una carrera más o menos sencilla hasta encarar a Moya y batirle por bajo. En la primera parte la iniciativa la siguió llevando la Real, y Portu pudo poner la ventaja en el marcador, pero mandó a las nubes un claro uno contra uno frente al portero local. En la segunda fue el Levante el que dispuso de las mejores ocasiones para marcar. Ninguno de los dos equipos volvió a ver portería y el partido acabó con un justo reparto de puntos.
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