jueves, noviembre 29, 2007

Ya conocemos a Iñaki Badiola

Dos horas de presentación, muchos minutos en radio y televisión, multitud de líneas en los medios escritos y un inmenso debate entre los partidarios acérrimos y los críticos a ultranza nos han permitido ya conocer a Iñaki Badiola y a su proyecto para devolver a la Real a la élite. Es el primer candidato a presidir la Real que salta a la luz pública, después de unos cuantos meses en los que se han lanzado numerosísimas especulaciones sobre su proyecto y sobre sus intenciones, y alguna que otra conclusión ya se puede ir sacando.

Lo primero de todo, decir que Badiola ha acabado con muchos miedos, incluso alguno de los que yo mismo podía tener. La entrada en la Real de Badiola, del famoso grupo chino y del capital extranjero no conllevaría cambios drásticos en la esencia del club. Ni va a dejar San Sebastián ni va a cambiar su camiseta. Ni la Real será un nuevo Granada 74 (con todos mis respetos para un equipo que ha cumplido la legalidad escrupulosamente para cambiar la sede del equipo) ni abandonará sus colores txuri urdin. Badiola no es Pitterman y la Real seguirá siendo la Real, con o sin capital chino.

Al final Badiola no presentó una revolución tan amplia como parecía. Sí propuso nuevas vías para ingresar capital. Y, sinceramente, no me atrevo a juzgarlas porque no puedo avalar ni oponerme a sus cálculos. No sé cuántos chinos comprarían una camiseta con el logo de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 y el escudo de la Real. Pero si estos cálculos son buenos, la Real puede ganar mucho dinero con esta vía. Eso es lo mejor que ofrece Badiola hasta el momento. No puedo decir que me ilusione, porque a mí las cuestiones económicas no me ilusionan. A mí lo que me ilusiona es ver a la Real en lo más alto y triunfando sobre el campo. Pero sí da confianza. Es verdad que el club necesita dinero, necesita gestores profesionales, necesita un futuro empresarial. Y eso parece que Badiola lo ofrece.

¿Sus fichajes? Pues para eso habrá que esperar. Siempre he dicho que a mí no me ilusiona que vengan jugadores por venir. A mí Diego Rivas no me ilusiona. A mí Herrera no me ilusiona. Porque siempre he pensado que para que vengan medianías, siempre habrá un chaval de Tolosa, de Ibarra, de Pasajes o de Irún capaz de hacer al menos lo mismo. La victoria ante el Málaga del domingo pasado fue ilusionante porque eran diez chavales de Zubieta los que estaban sobre el campo. Badiola habla de cuatro fichajes cerrados, tres cesiones y un traspaso, de jugadores de Primera División que, eso sí, no están jugando mucho en sus equipos. Para valorarlos hay que conocerlos, y Badiola los dirá cuando haya una alternativa electoral contra la que luchar.

El hasta ahora único candidato a presidir la Real tiene una ventaja importante. Lo que hay no nos gusta a casi nadie, los resultados nefastos están a la vista, y él propone algo diferente. Es evidente que el momento actual invita a todos los realistas a pensar en la necesidad inmediata de un cambio. La Real está sin dinero y en Segunda. Peor imposible. Y este empresario guipuzcoano nos propone algo diferente y mirando siempre hacia arriba y en positivo. Es un cambio. Y lo propone con seguridad. Sólo el valor de querer dirigir a la Real en un momento tan oscuro como éste ya es digno de consideración.

No me preocupa demasiado que aparezca o no otra candidatura. Ahora se habla de que Miguel Santos parece que no va a dar el paso, también de que podría darlo Joxe Joan González de Txabarri, el diputado general de Guipúzcoa desde 2003 hasta este año. Si lo hace, bienvenido sea. Nunca será malo que diferentes ideas sobre el futuro de la Real se pongan sobre la mesa para que los accionistas decidan.

1 comentario:

Unknown dijo...

vamos a ver que pasa mañana... ayer vì el partido de champions entre la Lazio y Olympiakos... Darko fuè grande... como siempre... que lastima... que lastima...