domingo, agosto 29, 2010

REAL SOCIEDAD 1 - VILLARREAL 0 Enorme prueba de valor

La Real ha dado una enorme prueba de valor. La prueba de que es un equipo hecho y preparado para competir en Primera División. Primer partido, primera victoria y Anoeta sigue en el estado de gracia con que finalizó la pasada temporada. El triunfo ante el Villarreal deja tantísimas lecturas positivas que hoy la nota predominante es la satisfacción absoluta. El equipo de Martín Lasarte ha demostrado que en su regreso a la Primera División va a ser un equipo duro, serio y competitivo. Como lo fue en Segunda. Su carácter no ha cambiado, y una vez que se dio cuenta de que la Primera División no se come a nadie, al menos a un partido, abrazó con fuerza sus opciones de ganar el partido. Y lo ganó, en muy buena lid y con todo merecimiento. Contra un rival de los importantes de la Liga (juega la Europa League), al que no permitió cantar un "uy" con auténtico peligro de gol hasta el minuto 86 de partido. Eso vale mucho. Casi tanto como los tres puntos que ya suma en el casillero.

Martín Lasarte presentó una alineación más o menos esperada y muy fácilmente reconocible. Fue casi la misma que logró el ascenso ante el Celta en junio, con la excepción de Bravo (aquel día, con el chileno en el Mundial, jugó Zubikarai), Sutil (por un Griezmann sin apenas vacaciones, que se asomó en la segunda parte tras la atronadora ovación de un Anoeta feliz) y Llorente (aquel día estuvo Bueno en punta). Con Zurutuza en plena forma, la única duda estaba en el doble pivote, y Lasarte decidió confiar en el que ascensió a Primera División, Rivas-Aranburu, en lugar de darle al manchego la pareja con la que comenzó la temporada, Elustondo. Y con ese once, la Real optó por conocer poco a poco el nivel de Primera, con tranquilidad, sin perder la cabeza. Dejó que el Villarreal manejara el balón y buscó la salida en contraataque (el mejor en estos minutos fue un Aranburu notable conduciendo y desplazando el balón) y con balones largos desde atrás. Llorente, Sutil (al que pareció pesarle el salto de dos categorías, hasta que empezó a cogerle el tacto al balón en jugadas de estrategia) y un entonces desaparecido Xabi Prieto no consiguieron bajar ninguno con peligro.

El panorama empezó a cambiar, curiosamente, con un defecto de la Real. Un libre indirecto al borde del área pequeña es una de esas ocasiones que no se pueden dejar pasar. Puede pasar factura no aprovechar algo así en otros partidos, pero hoy, afortunadamente para el equipo txuri urdin, no fue así. Prieto le tocó el balón a Sutil y su disparo lo repelió en su salida Diego López. Hubo un segundo disparo del propio Xabi, pero también fue despejado. El libre indirecto llegó por una debatible cesión al portero tras una magnífica internada de Aranburu. Y a pesar del error en la ejecución, la jugada demostró que la Real podía estar al mismo nivel que un equipo que sólo había perdido una vez en Anoeta y que presentó una alineación con dos campeones del mundo. Casi nada. Pues la Real no sólo no fue inferior, sino que tuvo grandes momentos en los que le demostró al Villarreal que puede ser bastante mejor.

La clave, como la temporada pasada, hay que buscarla desde atrás. Espléndido partido defensivo de la Real, con un Mikel González de nuevo imperial y con un Carlos Martínez al que la Primera División le da un plus. Y se lo da porque sigue siendo el mismo: serio atrás y muy atrevido en ataque. Sigue siendo un apoyo imprescindible para Xabi Prieto y no ha perdido por ello un ápice de su fuerza defensiva. Esa es, quizá, una de las mejores noticias que deja el partido. La fortaleza defensiva es tan grande que los tres cambios de Lasarte fueron ofensivos. Y eso es magnífico, porque si se mantiene permitirá siempre al técnico uruguayo buscar solucionar para ganar un partido, no para defenderlo. Diego Rivas también se enchufó al partido en los minutos que rodearon a esa jugada, y el Villarreal dejó de manejar el balón con tanta soltura. El centro del campo pasó a ser txuri urdin y Zurutuza empezó a crecer. Y con él, la Real. Xabi Prieto estuvo a punto de marcar tras una falta botada por Sutil que no llegó a peinar por poco. No se movió el marcador antes del descanso.

El gol llegó pasados los diez minutos de la segunda mitad. Y llegó como solía llegar la pasada temporada: por la calidad de los jugadores de ataque de la Real. Un jugadón entre Llorente (¡qué capacidad de pelea, lucha y presión la suya!) y Xabi Prieto, que éste remató con una sangre fría sencillamente maravillosa. Un golazo. Lo más difícil parecía hecho. Pero en realidad no era así. Lo más difícil fue saber sufrir en Primera. Fue aguantar al Villarreal durante media hora, con un esfuerzo titánico en el que participaron todos los jugadores al unísono. Nadie desentonó. Es complicado saber si el equipo reculó unos metros o si fue el rival el que dio un paso adelante, pero los últimos minutos tuvieron una constante presencia en la frontal del área de Bravo. El chileno, en todo caso, no tuvo más que estar seguro en su colocación, atento en los centros y detener con una maestría inisual un tiro a bocajarro de Jefferson Montero en una jugada que ya estaba anulada por fuera de juego. El partido tuvo similitudes con el que se jugó hace unos meses ante el Villarreal B. Acabó de la misma forma. Y con triunfo de la Real.

Decía que son muchos los méritos de la Real hoy, y es verdad. El más obvio es el triunfo, sumar tres puntos. Pero ojo a otras cosas. Le ha dado la vuelta al sentido de un partido que comenzó con dominio del Villarreal. Se plantó sobre el césped con seis debutantes en Primera División, y no creo que nadie notara menos oficio en los realistas que en los castellonenses. Siete canteranos en el once inicial. Nueve después de los cambios. Por convencimiento de que es la filosofía con la que tiene que vivir y morir la Real y porque son buenos jugadores que se merecen la camiseta que han vestido. No concedió más que un par de ocasiones claras de gol del rival, un disparo de Nilmar que se marchó rozando el palo a la izquierda de Bravo y un pie que tuvo que meter el arquero chileno ya en el descuento. La portería a cero una vez más, como en tantos partidos de la pasada campaña. Una victoria sobreviviendo a un mal arbitraje de un mal árbitro, que entre otras cosas se tragó un penalti por manos tras un cabezazo de Llorente.

Y una entrega brutal de absolutamente todos los que han vestido hoy la camiseta txuri urdin. Hoy la Real quiso ganar y ganó. En el campo y en la grada. Eso es lo que siempre ha sido este equipo. Habrá días en que el rival sea mejor, incluso que gane sin superar en el juego a la Real, pero hoy no era uno de esos días. Le preguntaron a Lasarte por algún pero, y citó la euforia. Falta mucho, cierto. Yo veo algún problema claro más, como el poco provecho que se sacó del balón parado (a Carlos Martínez hay que enseñarle a rematar mejor de cabeza, puede dar muchos goles), y Lasarte lo reconoció. Además, se puede hablar de no haber buscado el segundo gol en jugadas que podrían haber acabado en gol. El técnico habló de dudas en la salida rápida del balón, pero expresó que Griezmann mejoró ese aspecto del equipo. Yo creo que en los últimos minutos se pudo matar el partido. Pero da igual. El 1-0 da tres puntos. El primer día no es el mejor para mirar a la clasificación. Ya tendremos tiempo. De momento, vamos a disfrutar de este magnífico arranque. Que nos lo merecemos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

La Real jugó muy bien, muy seria y la verdad es que el Villareal era un rival duro para empezar esta nueva andadura pero el carácter de estos jugadores ha cambiado y creo que a vuelto el coraje que caracterizaba a la Real en el pasado. Sólo mencionar algo que has pasado por alto y es la dureza de Marchena, jugador que todos conocemos y que parece tener cuentas pendientes con la Real; la primera entrada a Griezmann tarjeta amarilla (y un lance más de un partido) pero en una jugada en el area pisa descaradamente y a proposito a Griezmann cuando éste ya había caído y no había peligro; sencillamente para hacer daño. Es lo único censurable del partido. El villareal es un gran equipo y un mejor club que no merece dar esa imagen en un campo de fútbol. Un saludo y Aupa.

María dijo...

Enhorabuena por esa primera victoria liguera. Algo de lo que no puede presumir el (mi) Real Madrid.

Besos!

Anónimo dijo...

Enhorabuena!! Mucha suerte y a seguir así!!

Saludos desde A Coruña!!

http://sempre-depor.blogspot.com/

cityground dijo...

Vaya debut mas bueno, era un partido complicado pero la Real dio buena imagen, no vamos a ser un rival fácil para casi nadie.

Mantener la solidez defensiva va a ser clave, arriba hemos mejorado con los fichajes. Hay una buena combinación en el equipo, jugadores jóvenes con veteranos, de calidad con mas peleones, tengo esperanzas en este equipo.

Los pies en el suelo que la permanencia sigue siendo el único objetivo.

De Ifran hablan muy bien, que se recupere pronto de la lesión que puede aportar muchas cosas.

Que gozada leerte por fin un artículo con la Real en 1ª y además ganando, no se puede pedir mas.

Juan Rodríguez Millán dijo...

Alter, tienes razón con lo de Marchena. Tampoco me gustó que Bruno o Cani abusaran de las faltas, parecía una consgina clara cortar con faltas la salida de la Real desde el centro del campo. Normalmente, me centro mucho en la Real, y más cuando me deja tan buen sabor de boca como el domingo.

María, muchísimas gracias, la verdad es que fue una tarde casi redonda. Pero la Liga dura 38 partidos, para nosotros y para vosotros...

Mateo, muchas gracias también a ti.

Cityground, yo creo que lo mejor es justo eso: la conclusión de que no vamos a ser un rival fácil para nadie, por lo menos en Anoeta. No pienso en objetivos, sólo en el Almería. El año pasado nos fue bien pensando así, partido a partido. Ya veremos en junio dónde estamos. Y muchas gracias, el placer es mío y me alegro enormemente de que disfrutes de tus visitas a este pequeño rincón txuri urdin.