Solo hay una novedad en la lista de Imanol con respecto al grupo que confeccionó para afrontar el partido ante el Nápoles. Aritz Elustondo es baja por lesión, aunque afortunadamente no parece tan grave como cabía pensar tras ver su ausencia en el once del pasado jueves. Imanol ha renunciado a incluir un jugador más en el grupo y se queda con 22 para hacer frente a esta nueva jornada de Liga. Las bajas, además de la de Aritz, son las de Zaldua, Illarramendi, Zubeldia y Sangalli. Los potrillos con dorsal del Sanse que siguen en la lista son los ya habituales Arambarri, Roberto López y Zubimendi. Y no sería nada descabellado ver a alguno de ellos en el once inicial, en el que Imanol ya ha anunciado que habrá algún que otro cambio.
No da la sensación de que esas modificaciones vayan a ser en defensa, a excepción de una. Remiro seguirá bajo palos, Gorosabel en la derecha, Le Normand y Sagnan en el centro y quizá Aihen en la banda izquierda para dar descanso a Montreal. Zubimendi seguramente ocupará el lugar de Guevara. Y a partir de aquí, muchas incógnitas. Lo lógico sería esperar la presencia de Merino y Silva, pero podrían tener un respiro del que seguramente se beneficiará un Roberto López al que hace algunos partidos que no vemos, igual que Oyarzabal o Portu, aunque eso dependerá del estado en el que se encuentren jugadores como Merquelanz, Barrenerxea o Januzaj. Da la impresión de que Willian José podría tener una nueva oportunidad en el once si Imanol apuesta por dar descanso a Isak, aunque tampoco se puede descartar que el pinta sea Bautista. Muchas dudas, por tanto, en una jornada en la que se espera con mucha expectación el once de Imanol.
Aún con el calendario incompleto, la Real volverá a defender el liderato en Balaídos. El equipo de Imanol es primero con catorce puntos, uno por encima de sus más inmediatos perseguidores, Real Madrid y Granada, que tienen un partido menos. El Celta, por su parte, es decimoséptimo con seis puntos, solo uno por encima de la zona de descenso. El conjunto txuri urdin, que suma nueve de nueve en las últimas tres jornadas, todavía no sabe lo que es perder fuera de casa, suma dos victorias consecutivas lejos de Anoeta por 0-3 y no encaja un gol como visitante desde hace 232 minutos, solo el Valladolid superó a Remiro en la primera jornada. El Celta, como local, tiene una trayectoria espejo con respecto a la de la Real. Ganó su primer partido, 2-1 al Valencia, y ha sufrido dos derrotas consecutivas sin lograr marcar, 0-3 ante el Barcelona y 0-2 ante el Atlético de Madrid, por lo que lleva 214 minutos sin celebrar un gol en casa. Junto a Cádiz y Valladolid, es el equipo más goleado en casa, seis tantos, una media de dos por encuentro.
Celta y Real Sociedad se han visto las caras en suelo vigués y en Primera División en 48 ocasiones, con 25 derrotas para el conjunto txuri urdin y once victorias, con empate en los doce partidos restantes. Balaídos, que siempre será el escenario en el que voló la Liga de 2003, presenta en cambio un buen balance para la Real en los últimos tiempos. De sus nueve últimas visitas, tres se saldaron con victoria y dos más con empate. El 2-5 de la temporada 2003-2004 que supuso el cese de Miguel Ángel Lotina como técnico celtiña sigue siendo su mayor goleada, con tantos de Kovacevic, Milosevic en propia puerta, Xabi Alonso y Nihat en dos ocasiones. La mayor goleada del Celta es el 6-1 de la temporada 1941-1942. En Segunda División, hay que sumar para la estadística nueve encuentros más, con resultados similares a los de Primera, pero con una anécdota. Las dos victorias logradas ayudaron a sendos ascensos en 1967 y 2010. En el resto, tres empates y cuatro derrotas.
En el último precedente, el de la temporada 2019-2020, la Real se impuso por 0-1 en la primera vuelta, todavía con público en las gradas, en un partido en el que sufrió en la primera parte y supo resolver en la segunda. El Celta pudo adelantarse con un cabezazo de Santi Mina a la salida de un córner, pero el poste izquierdo de Remiro evitó el gol. El partido se le puso de cara a la Real en la segunda mitad cuando Cheikh vio la segunda amarilla por una entrada a destiempo sobre Zubeldia y dejó a su equipo en inferioridad numérica. El único gol del partido llegó en el minuto 81. Un formidable pase filtrado de Odegaard por el centro lo protegió con le cuerpo Isak para acomodarse el balón a su gesto y ponerlo con su pierna izquierda lejos del alcance de Rubén Blanco. El gol subió al marcador con incertidumbre, puesto que el VAR revisó la posición de Isak con respecto a la defensa local. El sueco pudo marcar el segundo en los minutos finales, pero el meta del Celta lo evitó con una buena parada. Aún así, tres puntos muy sabrosos para una Real que seguía en las posiciones de cabeza de la Liga.
1 comentario:
Buena previa para afrontar este partido. Firmamos todos ese resultado al borde de la bocina del año pasado, y con ese VAR que aquella vez nos fue favorable.
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