Oyarzabal marcó la temporada pasada en Mestalla. |
Para colmo de males, a Eusebio se le acumulan los problemas en forma de lesiones. Para este encuentro de Valencia no podrá contar con tres damnificados de la triste noche de Salzburgo: Rulli, que se lesionó quién sabe si en el lanzamiento del penalti que no pudo detener o antes; Navas, que jugó mermado por una contundente herida en el pie casi desde el arranque del partido europeo; y Agirretxe, con una sobrecarga. Estas tres ausencias se unen a las conocidas de Carlos Martínez y Willian José, y también a la de Xabi Prieto, que romperá así una formidable marca de 92 partidos de Liga consecutivos sobre el césped. La buena noticia para Eusebio es la recuperación en tiempo récord de Héctor Moreno para entrar en una lista de 19 a la que regresan Kevin y Pardo, en la que se queda Gorosabel y en la que Zubiaurre entra como guardameta suplente.
En el once habrá bastantes cambios, pero con la idea fija de seguir el guión previsto. Toño se enfrenta a otra oportunidad en un campo difícil después de lo que sufrió en Villarreal. En la defensa, a priori, jugarán Odriozola y De la Bella como laterales, y Llorente y Moreno o Elustondo como centrales, en función del estado del mexicano. Illarramendi y Zurutuza estarán en el centro del campo, previsiblemente por delante de Zubeldia. Y en el ataque volverán Juanmi y Bautista, suplentes en Salzburgo, con Canales, Oyarzabal y Januzaj jugándose el último puesto en el once inicial. A la espera del descarte, menos opciones parecen tener Zubiaurre, Gorosabel, Kevin, Pardo y Guridi.
La solvente y a la vez importantísima victoria ante el Levante de la pasada jornada llevó a la Real a la mitad de la tabla, a la duodécima posición, con 29 puntos, once por encima de la zona de descenso y a la misma distancia de la zona europea. Su rival, el Valencia, está luchando por lo que quisiera el equipo de Eusebio. Marcelino tiene al equipo che cuarto con 46, con el puesto Champions afianzado con siete puntos de ventaja sobre el Sevilla. La Real lleva siete partidos sin ganar como visitante, y ha encajado goles en todos sus desplazamientos salvo en el 0-2 ante el Alavés, precisamente su último triunfo. Sólo el Sevilla y dos de los tres equipos en descenso, Deportivo y Las Palmas, han encajado más que la Real fuera de casa. Y el Valencia es intratable como local, ocho victorias en doce partidos y solo dos derrotas, que, eso sí, llegaron dentro de sus últimos cuatro encuentros en Mestalla, ante Villarreal y Real Madrid. Tras tres derrotas seguidas, el rival realista ha sumado dos victorias consecutivas.
Si la estadística general es bastante favorable al Valencia, los últimos años están cambiando la tendencia. Empecemos por el dato global, son 66 los partidos de Liga que han enfrentado a Valencia y Real, siempre en Primera, con 42 victorias locales, trece victorias y once empates. Pero ojo, en los últimos doce encuentros, con al menos un gol de color txuri urdin en diez de ellos, la Real ha ganado cinco, ha empatado tres y solo ha perdido cuatro. Las cinco victorias mencionadas se han producido dentro de las seis últimas visitas a Mestalla. Desde el regreso de la Real a Primera en 2010, solo dos derrotas, los dos partidos en los que no marcó. La mayor goleada realista de la historia es el 2-5 de la temporada 2012-2013, con tantos de De la Bella, Mikel González, Ifrán, Agirretxe y Vela. Por contra, la mayor goleada valencianista es el 7.1 de la Liga 1934-1935, temporada que llevó a la Real a Segunda División.
La pasada temporada, la 2016-2017, la Real confirmó lo bien que se le da Mestalla en los últimos tiempos con una nueva victoria, por 2-3. El partido no pudo empezar mejor. En el primer minuto, Juanmi enganchó con apuros un pase de la muerte desde la línea de fondo buscando a Canales en el corazón del área, pero el rebote en las piernas de Diego Alves acabó dentro de la portería. Un absurdo manotazo sobre Odriozola, en el rostro, se convirtió en el penalti que Willian José envió al fondo de las mallas para hacer el 0-2 a la media hora. A los veinte de la reanudación, una formidable galopada de Odriozola y su pase atrás al punto de penalti lo convirtió Oyarzabal en un contundente y merecido 0-3. La Real, con semejante ventaja, se durmió y revivió al Valencia. En la siguiente jugada, un penalti de Navas tan claro como absurdo, por mano, lo convirtió Nani en el 1-3. Zaza hizo el 2-3 en el 78, libre de marca dentro del área. Pero la Real, aún con sufrimiento, pudo aguantar la victoria.
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