martes, octubre 02, 2012

Debate pospuesto

Después del derbi, el realismo vive instalado en la felicidad. Por supuesto, me sumo sin dudarlo. La temporada pasada fue muy dura en comparación con lo que vivieron los vecinos. Los dos duelos contra el Athletic fueron decepcionantes porque la Real desperdició las primeras partes de ambos, sobre todo del de Anoeta, y los perdió por su falta de intensidad, pero también por dos actuaciones arbitrales muy deficientes que influyeron decisivamente en el resultado final. Y encima el Athletic jugó las finales de Copa y de la Europa League, lo que elevó el fervor rojiblanco hasta cotas que hacía mucho tiempo que no se habían visto, mientras nosotros padecíamos una temporada insulsa. Pero esta vez la victoria de la Real ha sido incontestable y merecida, con muy buenas noticias en general y con una sensación aún más aplastante que la que ofrecieron los dos goles de diferencia en el marcador.

No obstante, admito que a mí el cuerpo me pedía desde el domingo incidir en los aspectos más negativos del derbi. Que los hubo, aunque hayan quedado ocultos en la euforia desatada desde el sábado por la noche. Cuando las cosas van mal, el debate suele estar viciado por el derrotismo. Y cuando las cosas van bien parece que si abres algún debate es que estás remando en dirección contraria. Con el repaso al Athletic, el debate queda pospuesto. No seré yo quien hable esta semana de aquello que no me convenció. Me gustaría, creo que es algo que ayuda a un equipo a crecer y que no tiene por qué debilitarle (a menos que se considere que la crítica se hace con objeto de hacer daño, cosa que, obviamente, no es mi caso, porque corre sangre txuri urdin por mis venas). Pero no lo voy a hacer. Voy a esperar acontecimientos. Y ojalá que no tenga que acordarme de lo que me estoy callando esta semana después de este próximo partido como visitante.

Decía Bielsa antes del derbi que ganar un partido grande es propio de un equipo con aspiraciones, y no puedo estar más de acuerdo con él en esa afirmación. Y ya que hemos ganado el derbi, aún con los problemas que pueda haber en el equipo, creo que es hora ya de que se permita que esta Real tenga por fin aspiraciones. Que mire hacia arriba. Que sueñe con la gloria que su potencial le capacita para alcanzar. Si es así, habrá que dar la bienvenida al terreno de la ilusión a quienes hasta ahora han preferido apostar por un discurso excesiva e inmotivadamente cauto. Yo, desde luego, siempre he tenido claro que Griezmann es muy grande, que Illarra crece jugando más atrás, que Zurutuza es imprescindible, que tenemos dos buenos centrales, que hasta nuestro portero suplente da garantías que en otros equipos no se obtienen ni de los titulares. Que la Real tiene más de lo que muchos creen. Y pienso muchas más cosas sobre esta Real, pero, insisto, pospongo el debate. Darle la tregua a Montanier para el derbi funcionó. A ver si sucede lo mismo con este pequeño silencio administrativo que provoca la euforia de las victorias.

3 comentarios:

javilanzarote dijo...

Por muy bien que se juegue siempre habrá algo que mejorar, y sobre eso hay que criticar. No nos podemos conformar, si se critica es para mejorar, para si voy 7º subir al 6º, y luego al 5º.....
No creo que el Athletic este año sea la vara de medir ( está para bajar si sigue con sus líos), otra cosa es que en cuanto a actitud el equipo mejorara muchísimo en este partido. Pero está claro que hay que debatir y criticar muchos temas en los que la Real no convence.

javilanzarote dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Juan Rodríguez Millán dijo...

Javi, yo me pasaría el día debatiendo porque creo que así es como se ven los problemas y se encuentran las soluciones. Yo tampoco veo al Athletic como referencia, y por eso había cosas que me chirriaban, en lo que se hizo y en lo que no se había hecho hasta ahora. Pero, en fin, ganamos y, como decía, con eso parece a veces que el debate no conviene. Veremos en Sevilla.